POEMA 7

Vengo desde la distancia oculta de lo eterno,
buscándote entre cadalsos de rosas iracundas,
en elípticas exactas
olfateo el sin fin de tu fragancia,
te busco asumiendo los abismos
de mis penas profundas.

Bajo cielos de tormentas,
relámpagos y fuego,
me muerde la sombra
viajera de tu lejanía;
entre surcos violetas,
fanatismos y sueños despeñados,
un tímido destello de tu cuerpo
fluye ileso y me guía.

Me dejo llevar ilusión de mi vida
sin órbitas ajenas,
dibujando tu encuentro
más allá de las centellas...
Mientras cargo la sed del tiempo
y la impronta de la niebla,
tu luz decapita la oscuridad
y la enciende de estrellas.

El azul amaranto
de tus raros ojos bellos florece,
en el crisol desprendido
de un canto matutino y lejano;
allí, donde los sueños sumergidos
resurgen de la nada,
crédulo beso tu boca
en el viento ensortijado.

Hoy en tu vereda estelar
pastando mi amargura,
sediento me desgarro
hasta los huesos;
ante quimeras absueltas
por el tiempo te bebo
en noche de cromática luna,
en cauces de espejismos
y absurda idolatría.

Tato Ospina
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Colombia​

 

hermoso poema. Bellas imágenes. un abrazo saludos