Poema A Mi Opresor

Soy piedra consumida,
rubricada por la mano brutal
de mi opresor;
soy voluntad humillada,
por las zarpas salvajes
del infame absolutista;
Soy mente cautiva,
por la sentencia antojadiza
del irrazonable explotador;
¡Oh clemente libertad!
disipa mi sometimiento,
extrae de mi entorno
aquel demonio putrefacto
centinela de mi voluntad,
agota su credo avasallador
y somételo en lo justo;
¡Oh clemente libertad!
Devuélveme la senda soberana
hacía una vida de equidad,
¡Cédeme lo decente!
¡Ofréceme decoro!
¡Suprime la sumisión!
¡Otórgame lo justo!

LUIS MANTILLA (LUMAN)

 

El maldito no merece un poema, merece desaparecer de todos los planetas posibles y refundirse eternamente en el caos eterno!

Execrables sean para siempre todos los opresores del mundo!

Mil veces malditos sean para siempre sus nombres!

Felicito el poema y adhiero al contenido!

Abrazo libertario,
Eduardo.

 

Mientras el alma sea libre no habran cadenas indulgentes que opriman el sentimiento. Un fuerte abrazo Luis...!

 

Hola Luis...!!!!!
Solo tengo que decir: Sin palabras!!!
y como siempre ese toque especial y sutil de Tuti, que le pone la guinda a cada comentario....
Sabes? A veces el opresor, lo que hace es en esa piedra, y sin saberlo esculpir obras de arte, a fuerza de golpe y martillazo... Créelo, si no, ve atrás a la historia!
Adelante Hermanazo!
Saludos!!!!!!!!!

 

Ese Opresor No Merece Un Poema, La Libertad Siempre Debe De Estar, Buen Trabajo Luis Mantilla

Luis