Poema LXXVII, eterna soledad

POEMA LXXVII, ETERNA SOLEDAD

Continua mi triste soledad,
no se quiere marchar.

Si tú conmigo no estás,
ella en mi continuará.

Estas falsas esperanzas,
me matan por dentro.

Me ataca como lanzas,
enbadurnadas en fuego.

Te espero y te espero,
pero tú te alejas mas.

Y yo solo siento,
esta triste y eterna soledad.

Aveces te quiero,
y aveces te odio.

¿Como crees que me siento,
al acordarme de tu abandono?

Si me quieres,
¿por qué me haces sufrir?

Si me sientes,
como yo te siento a ti.

¿Por qué me haces un infeliz?

Juan Alonso Colete Dominguez​

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