Policarbonato de Junio. ( Corto )

00:05. La mano que acaricia el fruto maduro se crispa.
Vemos pulpa roja. Soles podridos aplastados en el suelo.
Las uñas comienzan su largo peregrinar
hacia el delantal de arpillera.
Cernícalo en sepia sin sonido.

00:06. Captamos el submundo de los dioses de adoquín.
La tristeza efímera en el lento desierto de la sangre.
El plano viaja por el lomo de la bestia.
Los pelos enredados como arbustos.
Alambres diseñados para la guerra o la demencia.

00:07. Sin perder más tiempo nos dejamos despeñar por el oído.
Cámara en mano, amuleto de ofrenda a la negrura.
Más tarde distantes parpadeos de neón.
Un saxo escalinando las alturas.
Voces de animales.
Gaviotas congeladas en el aire.

00:34. Sin llegar a verlo en su real dimensión,
el ojo facetado rastrea el camino en dirección opuesta a nuestras almas.
Es el elemento corazón en el nudo argumentativo.
) Este detalle es fundamental para comprender el posterior desarrollo (

00.35. Plano cerrado intermitente.
Órbita de fuego.
Espejo de medio minuto de espanto-espectador.

00:38. Voz en off narra in crecendo un loop interminable.
Están ahí afuera.
Están ahí afuera.
Están ahí afuera.
La escena trascurre con normalidad entre blancos edificios.
Esto explica la aproximación e indefensión de las esferas.

45:06. El sujeto B o actor de paralelas de agua cae por la pendiente.
A medida que cobra velocidad comienza a incendiarse.
Posterior a su muerte hacemos foco en las estrellas.
Volvemos a ver al sujeto B en sucesión inversa.
Las llamas lo arrastran hacia arriba.
El actor de las paralelas de agua renace como un fénix.

46:23. Desenlace remoto se funde con los títulos.
El orificio natural de la muerte inicia su ciclo.
Oímos sirenas atrapadas en la noche.
Vemos enormes barcos hundiéndose despacio.

 

me dejo hipnotizar por el clima de los primeros títulos de tu película

los dioses de adoquín se sientan conmigo en las butacas

primer punto de giro:
alambres diseñados para la guerra o la demencia se enroscan en mi cuello

la cámara busca el ángulo picado, me quiere hacer pequeña
distorsionarme hasta la negrura

un plano cerrado intermitente
descubre una órbita de fuego

segundo punto de giro:
medio minuto de espanto-espectador /
todas las caras que me rodean olfatean mi boca

quiero que se alejen pero sé
que están ahí afuera
están ahí afuera
están ahí afuera

desenlace remoto se funde con los títulos
el orificio natural de la vida inicia su ciclo

salgo de esta ficción.

 

Me alegra ver que te contagias de la escencia de cada poema. Redescubrir en tus respuestas el eco, el lado b de mi conciencia. Un placer extraño. Un placer al fin.

Gran abrazo.

 

El cine refleja a la vida. Tu película a la incesante escena cinematográfica hecha poesía.

Sin Pochoclo hasta los créditos. Y estrellas desde la primera hasta la última butaca.

Un abrazo y mi alegría por el reencuentro.