¿Por qué a mí?

Cada mañana, todavía te siento a mi lado... Cada tarde, espero tu retorno.

Cada mañana es tan usual, y con el correr de las horas se hace mas fuerte tu ausencia... Cada tarde pretendo mostrar una sonrisa, y de esta manera, tratar de levantar el ánimo.

La esperanza que era la unión de nuestras almas... Forzosamente ha ido debilitándose.

Mis tardes suelen ser tristes y sombrías... No puedo olvidarte, porque siempre habrá algo que te regrese a mi mente... Que el sol siempre será cálido, pero aquí, la bruma lo cubre todo, todo excepto tu sonrisa, que es lo único que alegra mis horas vanas.

 

Tristeza y aÑoranza en tus letras un abrazo