Por siempre en nuestro corazón

POR SIEMPRE EN NUESTRO CORAZÓN
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Quizás en algún momento de nuestras vidas
nos hemos preguntado
¿Qué pasará después de la muerte física?
ese misterio jamás lo podremos develar
sin embargo, si hay una certeza,
al morir
nos mudamos al corazón de quienes nos aman.
Hoy no nos acompañas en este mundo tangible
pero vives prendida en nuestros corazones,
sin brevedad, sin prisas
estas latente cual estrella sideral
surcando con tu luz a todos quienes te amamos.
Desde el velo del dolor lloramos tu partida terrenal
en proceso del duelo de tu ausencia
y en ese penar hallamos paz con cada recuerdo tuyo
con tu carisma e irreverencias
que nos dejó huellas imborrables.
Las risas, los llantos, las complicidades,
los enojos, el consentir sin medida,
fueron y son cauce de vivencias mágicas
que perduran en los ecos de tus caricias,
de tus palabras, de tu ejemplo, de tu talante,
de tu entrega, de tu entusiasmo, de tu valía,
tu infinito sacrificio y tu inmenso corazón.
No podemos decir otra palabra más que “gracias”
gracias por tanto.



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