Por siempre, Pequi González

Quien dice que los gatos son interesados
no conoce los gatos.
Tú no querías nada, tan sólo saludarnos en la cena,
con tu estilo muy fino y elegante.
Venías despacito
como ensayando el paso delicado
de un etéreo ballet en blanco terciopelo,
con tus suaves polainas silenciosas
que lustraban con mimo la madera.
“Aquí estoy”-nos decías- para dar tu presente
(que hoy me hace tanta falta).
Y nos mirabas
con tus ojos tan verdes y orientales,
entornados con dulce complacencia,
mensajeros de amor correspondido…
Ausencia inesperada,
cuarenta y siete días y te añoro,
quiero decirte adiós,
pero no puedo,
si hasta me duele el alma
con la genuina revelación de su existencia,
porque duele
de una manera atroz
e irrevocable en las partidas.​

 

Conmovedor y bello poema, escrito con todo el sentimienjto que requiere la situación, mi gatita Lorca estuvo conmigo 17 años, ahora hace 2 que nos dejó, a los animales se les ama de veras, son seres cariñosos, agradecidos y focalizamos todo nuestro amor en ellos. Espero que tu Pequi conozca a mi Lorca en el cielo de los gatos y que se hagan buenos amigos. Un beso muy grande amiga maygemay. Paco.

 

Gtacias por tus gratas palabras de comprensión. Sí se quieren mucho, Paco.
Con afecto

 

Siento mucho la pérdida de tu gatito, los que tenemos un animal de compañía en casa sabemos bien lo que eso duele.
Un abrazo.

 

Gracias, Eratalia, por la grata compañía de tus palabras. estuve casi un mes sin escribir, casi todo agosto, y aún me cuesta.
Cariños

 

Muchas gracias, por tu comentario y tus amables palabras, Libélula. Claro que comprendes.
Con cariño

 

Hermoso poema!!! Las mascotas por suerte forman parte de nuestra familia y la mayoría de las veces más fieles que estas mismas, por eso es que nos duele tanto su ausencia en el alma. ¡Simplemente bello y triste! Un placer disfrutar de su profunda poesía, Maygemay, reciba la más cordial felicitación y saludo.