Porque siempre los buscaré

Y así como las flores se abren,
y la tierra respira,

mis mustias promesas vuelan,
junto al olvido,
junto al tiempo nacido para perderse,

porque mis milenios no valen ni un futuro,
entre pasados que desconozco,
y presentes que no viviré,

la última tormenta que toca mi pecho,
electrocuta mis pulmones,
para que sienta sus pesares,
sus pesadillas más certeras,
entre toscos nubarrones,

la suavidad del último golpe
me deja absorto,

no hay palabra que describa tal momento,
ya que
ni siquiera podemos intentar descifrarlo,

caigo al lago eterno,
que aquí será pozo profundo,

mis ojos dejan de apreciar mis recuerdos,
para zambullirse de lleno
en las costas de un reino eterno,

mis pies recuperan sus energías,
pero mi cuerpo no reaparece,

salto hacia mis memorias,
y todo me parece tan poco mío,

tanto,
que no dudo en seguir,

de repente,
mis pasos se escuchan más adelante,

y me responden
que deben de abandonarme,

me susurran

lo que tanto había anhelado escuchar,

"somos tu vida",

"seremos tu futuro",

les sonreí, y les prometí,

que siempre volverán a mi.