Posado en su ala (Soneto)

Ave que en soledad mustia temblaba,
parca, temblorosa, ella se moría,
en gris bruma de niebla no entendía,
a su lado, su amor por qué no estaba.

El tiempo en cruel albur así pasaba,
ella ansiosa a su amor lo presentía,
pero un dolor punzante se vertía,
como un puñal en ella, se clavaba.

Ya sus ojos cerraba en forma lenta,
y en esa noche eterna de su tristeza,
exhaló su luz, como una bengala.

En Plúmbea mañana de tormenta,
fiel a ella la acompaña en su bajeza,
triste en llanto, su amor posado en su ala.

Tato Ospina
DRA
Colombia ​