Posesion

Posesión

“Muchos y multiformes son los oscuros horrores que infestan la Tierra desde sus orígenes. Duermen bajo la roca inamovible: se agitan bajo la mar y en las regiones subterráneas: habitan los reductos más sagrados. Algunos hay de antiguos conocidos por el hombre; otros, permanecen ignorados hasta el día terrible de su revelación...”
El Necronomicón



Libro I

“Creo en Dios padre todo poderoso, creador del cielo y de la tierra, y en Jesucristo su único hijo.....


I La tentación

Padre has cerrado los ojos a mi dolor
O acaso mis ojos ya no ven como antes?
Mis manos no logran aferrarse a las piedras
Y mis pies resbalan sobre la roca
Como si escalara montañas de hielo.
La cruz que sostengo se hizo mas pesada
Y el sudor de mi frente parece no conmoverte ya
El cielo se ha vuelto negro para mí
Y el rojo me atrae.....
Siento mi sangre mas espesa
Y la oscuridad se ha vuelto mi lugar predilecto.



II El pecado

“... perdona nuestros pecados, como nosotros perdonamos a nuestros pecadores y líbranos del mal..”

Conocí solo lo bueno
Aprendí que el sufrimiento era algo ajeno para mí
Solo había oído hablar de el.
Aprendí que la culpa se paga con dolor
Y el dolor genera odio, rencor
Hacia mí, hacia ti.....hacia Él.
Fui la oveja más mansa
De un rebaño corrompido
Por el poder, el dinero, la envidia
Hasta que vi su rostro en el espejo
Ojos familiares, mirada perdida
El rostro demacrado, la expresión vacía.
Ninguna cruz pesó tanto como haberme conocido.

Me odie desde ese momento
Y algo en mi cambio....
El cielo ha dejado de ser mi techo
Y la luna apenas puede mantenerme despierto
El aire que respiro me sofoca
Y mi ángel guardián hoy se ha vuelto mi enemigo.
Ya no creo en tus palabras
Ya no es tu mano la que me sostiene
...tampoco me sostienen mis piernas
He caído...
pero alguien ha venido a rescatarme
...y me tome de sus manos.



III La ofrenda

“...no soy digno de que entras en mi casa...”

Aún queda algo de sangre por derramar
No todas las palabras han sido dichas aún
Estoy parado frente al umbral
De mi vida, de mis deseos, de mis pecados
Seré la peste sobre Egipto
El mar que inundo la Atlántida
Seré Sodoma y Gomorra resucitadas
Seré tus palabras.
Tus hechos
Tu testimonio
Tu verdad
Tus actos
Seré tu cuerpo, tu sangre
De la alianza, nueva y eterna
Seré hijo
Serás Padre
Seré Tú
...Serás Yo.
Seremos uno.

...pero una palabra tuya, bastará para sanarme”