Practicando con diez espinelas y un epilogo

I
Cuando escribo poesía
mitigo mi sufrimiento
y no reparo en talento
ni le doy respiro al día
Siendo grande mi osadía
yo quisiera componer,
mas evitando ofender,
en décimas mi poema
teniendo siempre por lema
lo que tengo que aprender.

II
Busco una rima sencilla
para seguir mí argumento
en este mismo momento
cierro aquí con redondilla
Mas si no existe mancilla,
y el verso no se me encela
incluyo nueva espinela,
jurándoles por mi honor.
que le eché mucho valor
al poner aquí otra vela.

III
Que me perdone Espinel
por invadir su terreno
con estos versos yo lleno
lo que queda de papel.
Mas lo mío es el pincel
al estilo de Orbaneja
y si Espinel se me queja
humilde pido perdón
por haber hecho el bufón
o por mojarle la oreja.

IV
Y si pregunta la gente
que quien es ese Espinel
diré solamente de él
que se llamaba Vicente.
Pero que tengan presente
que tocaba la vihuela,
y compuso la espinela,
por décima conocida
estrofa muy aplaudida
desde Lope a José Cela.

V
Mi conciencia se me queja.
por no hacer otra espinela
para hablarle, si recela
de ese fulano Orbaneja.
En feo lugar le deja,
en el Quijote, Cervantes.
Sus pinturas hilarantes
con letreros describía.
Sin recato el exponía
figuras desternillantes.

VI
Pardiez que preguntarás
y la espinela ¿qué es?
por simple regla de tres
se que lo adivinarás.
No lo demoremos más,
puesto que veo que sudas.
Te ofrezco algunas ayudas,
para ver las espinelas.
Cuenta versos como velas
y entonces saldrás de dudas.

VII
Esta décima está inspirada en “La vida es sueño de Calderón de la Barca

Cuentan de un tonto que un día
tan pagado de si estaba
que ante el espejo escuchaba
lo que un mudo le decía
¡No puede haber madre mía
alguien más listo que yo!
Mas cuando bien se fijó
halló la respuesta viendo
cierto tonto sonriendo
que el espejo reflejó.


VIII
Si entras en este recinto,
quedarás impresionado
al ver al arte humillado,
perdido en un laberinto
Porque lo que yo aquí pinto,
es arte de un ser inculto,
medïocre, necio y estulto,
pero sin mala intención
por ello pido perdón
y solicito el indulto.

IX
Comienzo otra cantinela,
que me ronda en la cabeza,
superando mi torpeza
aquí os lanzo otra espinela.
Esperando por si cuela,
y no mucho desentona,
yo aquí expongo mi persona.
por no respetar la pausa.
En mi lucha por la causa
aquí termino la nona.
X
Verso aquí otro versículo
de este rollo tan extenso
hasta yo mismo lo pienso
que estoy haciendo el ridículo
No quise hacer mi currículo
ya que versando ando cojo
que lo que siembro recojo
lo expresa bien esta décima,
una espinela que es “pézima” (*)
que me hace sentir sonrojo.

(*) Debo tener algún ancestro andaluz que mis progenitores no detectaron, porque esta palabra me ha salido del alma. Este foro me perdonará el ripio.

EPILOGO A LAS DIEZ DÉCIMAS O ESPINÉLAS

Ya termino este tostón
y me olvido de Vicente;
no de Moret, evidente
por quien siento admiración
Si ofendí pido perdón,
por lanzarlas como flechas
que al no hacerlas a derechas
consumé la estupidez.
Mas, cuéntenlas si son diez
y despejen las sospechas.

 

Placentero visitarlo. Felicidades.

Saludos,

 

Bravo, amigo, tienes gran dominio con las décimas. Ha sido un placer recorrer tu espacio y tu poesía

Saludos afectuosos

 

MIS FELICITACIONES Epimeteo, un buen rato me has hecho pasar con tus buenas décimas espinelas, admiro tu talento, Gracias por compartirlas.
Un abrazo poeta.

 

Muchas gracias, Rogelio y me alegro que fuera un placer pasarte por esta página
Saludos cordiales

 

Gracias Mariluz una vez más.
Recibe mi afectuoso saludo

 

Gracias Ricardo. Se trataba de eso, de pasar un buen rato.
Un saludo cordial

 

Un excelente trabajo nos dejas en esta espinelas amigo
epimeteo, donde nos demuestras tu talento poético
en cada uno de tus veros tan bien hilvanados de
principio a fin. Te dejo reputación merecida.
Besos y un abrazo.

 

Muchas gracias Nube blanca. Es siempre un placer recibir tu visita y comentario.
Un cordial saludo