prudencia

Cálices fucsias se han levantado a vestir sobre tus senos el aire inmensurable que tus danzas dejan atiborradas en el cielo de mi cabeza.
128 fantasmas se han volcado a leer apaciguadamente todos tus filamentos vestidos de monjes para celebrar tu virgen mundo
esas cosas que parecen aves transitorias por mi vista son solo vestigios de lo que tu a mi de vez en cuando me regalas de rodillas y sin miedo a que yo te ultraje
si. Tal vez te parezco impuro y vació de túnicas sabias
Si. Ojala te parezca eso para ver como tratas a quien te es menos para ti
haber si saltas ese cerco de prejuicios por ser o no mejor
128 fantasmas no me dejan tranquilo porque me cuentan y cuentan tu inescrutable belleza; se agolpan en mi universo cuadrado y trastornan mis sueños tan tranquilos; tan tranquilos como tu los creas y como yo los pinto
me transformo en tu palabra: arida de sentimientos falsos, sin sindicato de falsas amistades.
Eres mi consuelo aunque no seas mi amor de la mas hermosa mujer
Eres quiza ese motor que poco a poco se calcina en mi cuerpo
Quiza seas el verde prado de mi descanso interior. ese yoga espiritual en el cual no creo
Mi dama dueña de ilusiones, corolarios, teoremas y leyes que a muchos se les niegan desvestirlos
Mi flor exquisita de vestidos que la madre naturaleza te brinda
a raudales
tu, nova reflejada entre mi pecho y el reflejo de crepúsculos de este y mil mundos que te aman
a ti mi semidiosa amada
para ti es este silencio profundo, este corazon timido, este suspiro de vida, un abrazo
y éste, mi ultimo momento de inspiración.​