Qué desastre

Muchos los segundos que provocan desamparo cuando los disparos llaman a nuestra puerta a diario
y se consumen los días que van pasando cuando nuestras almas mueren a golpe de talonario
tan manchado por la sangre que se desprende a pares con olor a despedida y con sabor a vinagre, lluvia roja desfilando a raudales
y el tiempo son las cenizas que nos quedan cuando las manillas giran y, en lugar de sumar, restan
gente idiotizada que nos niega la palabra y solo busca la paja para su propia cabaña
se prefiere el efectivo a seguir viéndose vivos, a tenerse frente a frente para hablar, a latido a latido para amar

¿quién es ese que asusta y trata de convencer?
¿quién maneja los hilos y desahucia las palabras del papel?

qué desastre el que se presenta ante nuestros ojos
qué desastre el que acelera y corre a por ti
qué desastre el presenciado, el de los mares y campos
solo nos queda morir

cuántos los orgullos que separan relaciones y hacen vernos frente a otros como seres superiores
mutilados por creencias narcisistas cuando, en el fondo, son tan vulgares como absolutistas
camuflados en el tedio alimentando al mal genio para devastarlo todo y adueñarnos de un imperio, lo tomamos muy a risa y es serio
entre tanto, continuamos sonriendo agarrando una bandera y ondeándola al viento
no somos capaces de usar el raciocinio, tomándonos muy a pecho lo que brama el vecino
para colmo, se echa al traste lo que siempre ha sido arte porque ahora, de repente, sienta mal cuando no nos ha importado jamás

¿quién programa las mentes para tener el control
y hace de nuestro oficio comportarse como lo hace un bufón?

qué desastre el que se presenta ante nuestros ojos
qué desastre el que acelera y corre a por ti
qué desastre el periodismo, contabilidad y seísmos
solo nos queda morir

qué desastre el que se presenta ante nuestros ojos
qué desastre el que ahora aprieta y corre a por ti
qué desastre el que hoy actúa y lo hace a su antojo
qué desastre, qué desastre
qué desastre, ¿qué ha pasado? La tolerancia ha caducado
por el interés te quiero, le dijo un amo a su perro
qué desastre y cuánta amnesia, catolicismo e iglesia
en el nombre del desmadre, te nombro rey del desastre

 

Excelente. Un placer leerle. Saludos.