que seas feliz

lanzaste mil puñales
escudándolos en tu mirar
con palabras temporales
destruyendo mi realidad
dejándome con los males
que tu ayudaste a provocar
y de mi te aprovechaste
sin un atisbo de piedad
y mi corazón curaste
eso no lo puedo negar
para después arrancarle
toda su fuerza vital
con mentiras despiadadas
finjiendo hasta el final
que estabas enamorada
por lo que pudiera pasar
pero no tengas miedo
que tu paz no he de turbar
pues tu has elegido el pañuelo
y con el te tendras que secar
no encontrando amor mas veradero
que el que traicionaste sin piedad

 

Hola!
Bueno al final cuando alguna relación no funciona es mejor dar un paso atrás y desearle lo mejor
para también nosotros poder continuar, bello escrito, abrazos!