Ragnar lodbrog. El yarl

Tras el cuello de su dragón, que no quiere nombrar,
con riendas de plata sigue la estela añil del mar.
Cubren su cuerpo altivo, rubio, fornido,
pieles, cueros, metales machacados,
con piedras afilados.
Sueña con el Walhalla y un caballo de ocho patas,
herraduras de oro y clavos de plata.
Habla con Donar Thor, que le preste su martillo,
para forjar armaduras, escudos, espadas.
A Woda Odin pide walkirias que rocíen
con fuertes granizos, en el fragor de la batalla,
las huestes de sus enemigos,
que no besen las frentes de sus gentes,
con besos helados, besos de muertes.
En la victoria, celebrar con jabalíes,
y cuernos de hidromiel rebosantes,
el que no haya destierros, suspiros, ni muertes.

 

Hermoso, exquisito tu poema...Bienvenido, todas las estrellas. Mis saludos poeta.

 

Bienvenido... Buenas letras... Un gusto leerte