Razón de ser

Para sentirme feliz no necesito entrar en una talla 38, subirme en unos tacones infinitos,
embutirme en un vaquero, correr 15 kilómetros al día, rellenar un sujetador,
prohibirme un helado, retocar mi cara o vestirme como una adolescente.
Para sentirme feliz, necesito aceptar que el tiempo pasa, gustarme tal como soy, mostrarme natural, sonreír, soñar y amar.
En definitiva...quererme y punto, muy orgullosa de mis años, no tengo una figura asombrosa
ni un estómago plano, adoro la comida, me apasiona la música, no tengo las curvas perfectas, al contrario, tengo cicatrices por dentro y por fuera, que han marcado mi vida.
Tengo un antes y un después porque tengo una historia.
Algunas personas me quieren y otras no tanto.
A veces voy sin maquillaje y otras producida, hay veces que algunos piensan que estoy medio loca, pues si, la locura es parte de la cordura dicen y si no eres loca, eres cuerda y las "cuerdas" atan, jajaja.
No pretendo ser alguien que no soy, puedes quererme o no...y si yo te quiero, puedes estar seguro que lo hago con todo mi corazón.
Autor: Anónimo.

Me gustó, me sentí identificada por eso lo comparto.

 

Creo que también aplica para algunos como yo...
excepto lo del maquillaje.
Muy cierto... en la avenida de los sueños... la vida nos rebasa.