Razonamiento de un presidente a su gente

Señores y compañeros que salisteis de las Urnas
no por virtud y si por premio para ganar honra y dineros,
ya sabéis que hasta aquí, mientras quiso la fortuna,
no ha habido falta ninguna por vosotros ni por mí.

Ahora, por los pecados de algunos, veis que nos vemos
de desprestigios reputados,
y por casi todos los votantes olvidados.

Veis los peperos poderosos y más fuertes cada día,
con Arenas imparable junto a otros hombres prestigiosos que,
si triunfan nos dejaran fuera de Andalucía y
con la faltriquera vacía.

Pues ya que con osadía queramos acometerlos,
antes de tocar en ellos nos mata la hipocresía.

Para estar aquí perdidos estas causas grandes son,
cuanto más que hay corrupción y estamos casi todos allí
hasta las zancas metidos.

Y por nuestra mala suerte, si esperamos a mañana,
caeremos sin enmienda, y no gana el partido nada,
el remedio es retraer, por excusar tanto mal,
ya que el pueblo soberano es del mismo parecer,
pues lo está pasando francamente mal.

Y caso que de este hecho alguna mengua ganemos,
al menos excusaremos de no marchar sin provecho.

Cualquier daño y perdición con la dimisión se repara;
más vale vergüenza en cara que mancilla en corazón,
y no llegar con nuestros huesos para alimentar la prisión.

Pero diga quien dijere: que si es honra combatir,
nos es menos saber huir cuando el tiempo lo requiere.
Aperciba, pues, cualquiera los pies, si queréis salvaros,
porque yo pienso llevaros, si puedo, la delantera.
joanmoypra/marzo/2012
http://sancholanza.blogspot.com.es/