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Recordando a Olavarría...

Tema en 'Prosa: Sociopolíticos' comenzado por José Luis Mendoza, 3 de Agosto de 2014. Respuestas: 0 | Visitas: 699

  1. José Luis Mendoza

    José Luis Mendoza Poeta fiel al portal

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    Recordando a Olavarría:(n1933-2005+)
    YA TODO ESTÁ DICHO LO POQUITO
    QUE FALTA SERÁ CULPA DE NOSOTROS
    Por José Luis Mendoza
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    Nuestros olvidos o faltas de memoria siempre nos han llevado a los callejones más obscuros de nuestra historia y por supuesto de nuestras realidades.
    A estas alturas de nuestros sufrimientos y de la pérdida total de nuestras libertades, en un país totalmente destruido en todos sus estamentos, hay quienes aún no creen que estamos viviendo una cruenta Dictadura.
    Pero antes que Chávez tomara el poder, el 12 de febrero de 1999, muchas veces escribimos lo que esto iba a suceder y la voz más destacada de la época está muy viva y sonante, me refiero a Rafael Poleo.
    Pero la más significativa sigue siendo la del diplomático, politólogo y periodista Jorge Olavarría cercano consejero y asesor de Chávez.
    Recuerdo todavía la foto de este ilustre venezolano llevando y mimando en brazos a la niñitica Rosinés muy cerca de la morrocoya en el jardín de la residencia de la pareja presidencial. Pasaron pocos días para escuchar la valiente denuncia premonitoria que hiciera Olavarría de los planes dictatoriales de Chávez y de su camino hacia una férrea Dictadura Militar.
    Era un 5 de julio de 1999, sesión solemne del Congreso de la República, apenas cinco meses de la asunción al poder del culpable de todas nuestras desgracias. Allí Olavarría, como Orador de Orden, (creyendo quizá que sus palabras nunca se iban olvidar) dijo:
    -Esta solemne celebración, la última del siglo, coincide con una hora menguada de la Patria. Una hora triste, tensa, bochornosa signada de peligros y de amenazas para los que queremos vivir en libertad y democracia bajo el imperio de la Ley. No es hora de historias pasadas. La historia se está haciendo aquí y ahora. Es la circunstancia la que nos exige seguir el ejemplo de los próceres que firmaron la Declaración de la Independencia, de los que fundaron las bases y sentaron los principios de un Estado Constitucional en el cual la ley…”la ley respetase la libertad y el honor”, como decía una cancioncita que andaba por ahí recorriendo las calles de la Caracas de entonces. Es la hora de hacer verdad el Himno… es la hora de hacer como ellos, no de hablar de ellos, porque si no seguiremos cantando que el vil egoísmo otra vez triunfa.
    Y más adelante afirmó:
    -Con el recuerdo de las heroicidades de los Libertadores no vamos a exculpar las cobardías de hoy. Así no aprenderemos las lecciones que con el sacrificio de sus vidas nos dieron… Con esa retórica apenas lograríamos anestesiarnos del dolor de las verdades que hoy nos abochornan y que nos han traído donde estamos. Por ese camino no nos vamos encontrar jamás con nosotros mismos.
    Y aquí vienen sus presagios: -Los hechos de hoy plantean ante la consciencia de los venezolanos de hoy la obligación de hacer algo por lo que hoy amenaza la esperanza de cambiar lo que hay que cambiar. Esos hechos pueden hacer, y si les dejan, van hacer retroceder a Venezuela a un ayer cuyos atavismos de violencia están latentes y sólo falta alguien que los despierte. Y alguien los está despertando. Mañana nadie podrá declararse eximido de responsabilidad si hoy -cada quien- no asume la responsabilidad que le corresponde sin egoísmos, sin cobardías.
    Creo que Olavarría nos sigue fustigando y repitiendo desde su tumba: “si los venezolanos nos dejamos alucinar por un demagogo dotado del talento de despertar odios y atizar atavismos de violencias con un discurso embriagador de denuncia de corruptelas presentes y heroicidades pasadas, el año entrante (2000) Venezuela no va entrar al siglo XXI. Se quedará rezagada en lo peor del siglo XX o retornará a lo peor del siglo XIX.

    En su largo y sesudo discurso y al referirse a la Asamblea Nacional, dijo: -una asamblea dictatorial obediente a su voluntad que tendrá, según dicen, el poder de disponer de nuestras vidas a su arbitrio, porque no estarían limitados por la ley sino a voluntad de la mayoría. ¡¡¡!!!.
    Y he aquí el pronóstico fatal de Olavarría: “lo que el Presidente Hugo Chávez está haciendo con las Fuerzas Armadas, legal, paralegal, metalegal o ilegal, va a llevar a la destrucción de una de las instituciones de mayor prestigio de la sociedad venezolana. Una institución cuyo nivel de profesionalismo había costado muchos años y muchos esfuerzos llegar hasta el lugar de donde estaban”.
    Esto fue dicho a cinco meses del primer gobierno del Dictador Chávez y todo se ha hecho realidad, pero parece que muchos lo han olvidado, creo que no así los estudiantes.
    Ojalá hubiera podido transcribirlo todo, pero en You Tube dura unos 10 minutos que podrían llenar unas 10 cuartillas.
     
    #1

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