1. Invitado, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"

    !!!Te va a encantar, no te la pierdas!!!

    Cerrar notificación

Recuerdos de juventud

Tema en 'Poemas Melancólicos (Tristes)' comenzado por Alberto Moll, 6 de Octubre de 2013. Respuestas: 0 | Visitas: 320

  1. Alberto Moll

    Alberto Moll Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    6 de Octubre de 2013
    Mensajes:
    2
    Me gusta recibidos:
    0
    ¡Qué lejanos recuerdos,
    tenuemente nimbados de nostalgia,
    levantan su aleteo
    con suave pertinacia,
    de mi alma en las recónditas estancias!

    Dulces reminiscencias
    de un pasado que es ya irrecuperable
    y selló mi conciencia
    con su huella imborrable,
    hoy retornan de nuevo inmarchitables.

    ¡Los primeros amigos!
    ¡Las primeras ingenuas ilusiones!
    ¡Los inciertos inicios
    de cándidos amores!
    ¡Las primeras angustias y dolores!

    Los sueños compartidos
    con aquellos amigos juveniles.
    Los inmaduros juicios,
    de seriedad risible,
    brotando en nuestras mentes infantiles.

    Las alegres reuniones,
    inevitablemente bulliciosas,
    en que las opiniones,
    de forma candorosa,
    disputaban sin fin unas con otras.

    Los debates frecuentes
    sobre todos los temas de importancia,
    tenidos arduamente,
    con torpe petulancia
    y la osadía aneja a la ignorancia.

    Las nocturnas salidas,
    por primerizas tan ambicionadas,
    que, ajenas a la prisa,
    lentas se prolongaban
    hasta sentir llegar la madrugada.

    Los pausados paseos
    en las mañanas claras de domingo,
    en que, con titubeos
    y torpe desatino,
    a las tiernas muchachas perseguimos.

    Y aquellas confesiones
    al amigo del alma más querido,
    íntimas expansiones
    de un espíritu herido
    por los primeros golpes recibidos.

    Para todos nosotros
    todo era nuevo en este nuevo mundo
    al que, con pie medroso,
    entrábamos sin rumbo,
    estrenando el vivir cada segundo.

    ¡Qué hermosas nos parecen
    aquellas pubescentes experiencias,
    desde esta edad aleve
    que, con cruel contundencia,
    en nuestra alma ha matado la inocencia!

    ¡Qué trágico destino
    que aquellas incipientes esperanzas
    marchitas se han hundido,
    y han quedado enterradas
    bajo el polvo falta de la añoranza!
     
    #1

Comparte esta página