Recuerdos.

Recuerdos.

Siento nostalgia saber que aún queda poco de la llama que había, que se desvanece con el pasar del tiempo, y me tuvo pensandote noches en vela, ese sentimiento dejó profundas heridas en mi corazón y alma pero hoy sólo quedan cicatrices.
El amor, el sentimiento más noble que no elige sólo siente por alguna razón, terminó por crear confusión del porqué la vida nos separó, es complicado saber que sucedió, en el Camino quedaron varias preguntas por responder, quizás miedos o malas decisiones no lo sé, y aunque pasen los años te recordaré como el ser que un día trajo tantas alegrías a mi corazón y a mi alma.
Aún no sé qué piensas, es difícil llegar a ti, siempre cuidaste tus sentimientos para que no te lastimen, esa barrera entre los dos créeme que no funcionó.

 

Buena prosa, Karlia. Es difícil la etapa de duelo porque uno arrastra muchas dudas sobre lo que ocurrió, cómo se llegó a ese desenlace y si estuvo bien establecer una relación con la otra persona. Sentí identificación con la última oración del segundo párrafo, puesto que, aunque el tiempo apague la llama del amor y el presente sea duro, esos sentimientos perdurarán en nuestras vidas.

Un abrazo gigantesco.

 

Hola Javier me alegro que te hayas identificado con la prosa, la verdad es que transcribir mi experiencia fue la única manera de dejar de pensar en esa persona y ahora me siento más en paz y tranquila de sacar todo lo que sentía y seguir mi camino.
Gracias por tu comentario.

 

Me alegra que hayas canalizado esa experiencia en una obra literaria. Eso es lo maravilloso del arte, que cumple una función terapéutica y nos permite crear cosas bellas a partir de vivencias difíciles. Eso te permitió liberar tu interior y cerrar un ciclo.

Saludos.