Repicando la puerta con las manos llenas

Algo debemos preparar con tanta lágrima que traigo.

Las pesqué desde la mañana en aquel río de ternura

con el que me guío para llegar hasta aquí y encontrarte

y harto tiempo llevo caminando ese trazo de tristeza

desde mis mejillas a tu corazón

como para que no me abras la puerta esta tarde.



Vamos a filetear este montón de esperanza

antes de que se pudra

y quitémosle todas las espinas.

 

A veces se imponen las ganas de estar, de ser dos en uno y las pequeñas recillas se apartan unas horas, esto es lo que me ha sugerido tu bello poema amigo Ariel, son sentires de un poeta melenudo, barbudo y algo locuelo. Un abrazo. Paco.

 

Oye, ¿cómo sabes que soy melenudo y barbudo?
Le atinaste jajajaja, eres adivino
Gracias por tan bellas palabras y pasar a leer
Buena onda, saludos y abrazo, Ariel

 

El simbolismo de la pezca se dice es la abundancia, la prosperidad, entonces, partiendo desde ese punto, estamos ofreciendo algo precioso, casi ofrenda.

Es precioso, Ariel.

Saludos

 

Jaja, que bonitas pabras.
Y es verdad, desde que jesus hizo sus milagros, los pescados tomaron esos significados.
Que bueno que me andas leyendo c:

 

Te pierdes, chavo. Yo, que soy adicto al azúcar en la baba y la pátina que el llanto deja en las estatuas, envidio este poema. Chido encontrarte en este foro.
Saludos.