Residuo

No hay nada más aburrido
que la certeza de la rutina,
esta esbelta criatura
desala tu corazón, devora
su contenido e inocula
en su interior, la desdicha
de saber que todo pudo
haber sido mejor, diferente, distinto.
Gradualmente disminuye el tono de voz
y el ritmo de los pasos, los síntomas crónicos:
una sonrisa sin ganas, unas pupilas vacías.

 

Bravo. La rutina mutila.
Desfigura. Entristece.
La rutina es como la Razón abstracta
que no quiere abandonar los barrotes logificadores o los límites esquemáticos que pone a su modelo de realidad.
Pero, emocional y espiritualmente vivos, cada percepción puede darnos una sorpresa, una faceta desconocida, algo nuevo... En la rutina, nunca habrá asombro ni por tanto, novedad...

carlos

 

Excelentes versos, ese cierre es para meditar. Bien dicen que el "hubiera" no existe.
Mis cinco estrellas y un beso para ti,:::hug:::

 

Muy cierto, eso, eso exactamente es lo que quise expresar, gracias por el comentario, Carlos, un abrazo!

 

Gracias, baryshnikova, sí, para meditar, una abrazo!

 

Otro abrazo para ti, me alegra que te gustara, muchas gracias!

 

Gracias, Gaby, muchas gracias, un abrazo, nos leemos!

 

mi buen marquez...un placer leerlo de tanto tiempo...un abrazo infinito...

 

Ni tanto, apenas un segundo largo, un abrazo, Devoroux, gracias!

 

una sonrisa sin ganas... unas pupilas vacías
tu poema, simple pero borrascoso, penetrante y muy profundo.