Retrato VIII

Un hilo de sangre se queda en mi bolsillo,
le debo tanto a un alguien que sigo sin conocer.
Un ectoplasma de luz se refugia en mis ojos,
me robaron el alma en el mismo instante en que le dieron vida.

Un humo de rosas escapa por mis orejas,
estoy fumando con los sentidos equivocados y hasta que no muera no caeré en mi error.
¿tu puedes sentir el latido que rasga mi piel?
Yo no.

Un río de alcohol llena de a poco mis heridas,
hasta en la nariz tengo marcas del pasado.
Tu puedes ver como las flores cubren mis ojos
a veces solo quiero decir que estoy muerto,
pero siempre respiro, y casi siempre escribo.

La gente parece inmóvil a mitad de mi cuerpo,
en mi desvelo he sido muy negro y nada me asusta.
Quisiera oirme como un árbol, irme también,
he soportado la sombra por dentro...
Ojalá lo entendieras.

 

Brilla tu pluma, saludos.