Ritual eterno

Se vestia de purpura cada mañana cada vez que iba de visita hacia la tumba de su amado eduardo, su gran amor, que la habia hecho tan feliz en solo cuatro meses, tiempo en el que habian permanecido casados,siempre que se despertaba, se quedaba acostada de lado mirando la palida fotografia del portaretrato, absorta en ella en un instante casi semiinfinito, preguntandose porqué la había dejado tan sola.
tenía un ajuar de vestidos y atuendos color púrpura y siempre tardaba unos minutos en decidir que llevar puesto, aunque todos los vestidos parecían iguales, un collar de pequeñas bolitas era su preferido; siempre elegía un traje que le llegaba hasta las pantorrillas, para evitar las miradas incómodas a sus bien contorneadas piernas, un sombrero tipo pava que se colocaba de tal forma que no se viera su rostro y tacones bajitos ya que era de buena estatura.presurosa salía rumbo a la estación de buses y se sentaba en la última banca sin saludar ni mirar a nadie y sosteniendo en su mano derecha un monedero de cuero.
Cristina la loca, le decía la gente y murmuraban de ella que había perdido la cordura después de aquel fatal suceso y criticaban su forma de vestir, no se atrevían a acercarsele porque ella no hablaba con nadie y se ponía histérica cuando alguien se la quedaba mirando.
Balbuceaba en voz casi inaudible mientras llegaba al cementerio, era como si hablara con alguien o talvez consigo misma: 'te amo, te amo, por que me has dejad.. " así repetía y repetía durante el lento trayecto del incómodo y ruidoso automotor.
Al llegar a su destino, el antiguo cementerio de los protestantes, un lugar tan nefasto que parecía sacado de las películas de terror, con sus tumbas atiborradas de moho y de lodazal, era escenario propicio para el encuentro de las llamadas sectas. Pero a ella no le importaba el lugar, para ella era como llegar a un paraíso, el lugar donde podía sentirse tranquila, donde podía encontrarse con su amado, su segundo hogar.
Ay! Eduardo por qué me has dejado?
gemía con su voz tenue - ay! vida por qué sigues conmigo? ,amiga muerte por qué no vienés a rescatarme? - decía con lágrimas en sus ojos - ven muerte y llevame junto a él...
luego de tan melancolico monólogo, anudó sus cabellos y secó sus lágrimas para poder terminar con el acostumbrado ritual que siempre hacia en cada visita a la lúgubre tumba de Eduardo. La limpió y adornó y luego sacó de su monedero el dije en forma de estrella que le regaló la noche de su compromiso, lo acercó a sus labios dándole un pequeño soplo y enterrandolo en la tierra ,luego dijo cerrando los ojos:
-Toma amado mio,mi alma toda te la entrego, ya no me pertenece más, estaré atada a ti por el lazo que une a la vida y la muerte, este lazo de amargura y de dolor! - se arrojó al suelo como esperando hundirse en el terreno, con su rostro desencajado y su vestido empolvado miró al cielo y lanzó un gemido que alcanzó a escucharse hasta el vecino barrio: te amo, te amo , por que me has dejado?...
La gente del pueblo en la noche escucha los gemidos por eso nadie se atreve a salir, la loca había muerto hace ya varios años ,la encontraron acostada en su cama con los ojos abiertos en dirección a la fotografía de eduardo; tal vez quedó allí esperando,
Tal vez nunca se encontró con el, su ritual sigue en el cementerio ...