Sábado mestizo

Y yo que llegué al sábado caminando entre piedras y rios
casi por compromiso me tapaba con la arena y luego suspiraba bajo un foco de estrella
era tibia la noche como un cortejo que palpita y huele a semilla que se desprende de algún cabello.
y la vi como un punto que choca en un sueño
Y sin lenguaje estire mis manos mestizas
sobre la noche Blanca
Y cayeron sus manos de sábado
Como si ellas fueran dos ramas sumisas ante el Rocío
y la llevé hacía una esquina poblada de sombras
y ahí mis manos
se toparon con esos obstáculos de nacar de seda
coronada con pezones.
Yo hice a un costado la ciudad
Y mi torso hizo un eco
De su gemido.
Y rece como a un milagro ante ese nido
Ella miraba mis ojos desnudos,
Yo con un respiro la traje
A mi oído.
Su cutis de arena blanca donde se posa la luna
Era tan delicioso como el vino
Dimos dos pasos
y recorrimos el mundo
en esa esquina con besos de sábado
hasta el ombligo
Nuestros nombres?
Que importan nuestros nombres
Si tan sólo vivimos
Un amor en el camino. ..

 

Belleza de contenido, querido Marquelo, reforzado con una sucesión de imágenes
realmente singular; algo no tan fácil de conseguir. un gusto recorrer tus líneas com-
panero.
Cordialmente:

 

Gracias por tu comentario.

 

Sugerentes y bellas imágenes para un bello poema sobre un encuentro sensual quizás efímero o no, quien sabe...Un abrazo amigo márquelo. Paco.

 

Gracias Paco por tu comentario. Un placer.

 

Apasionada la escena de tus versos querido amigo...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

 

Bellísimo poema, merece ser leído

 

uoh negrito !!!
siempre escribiendo tan bonito
es un gusto leerte
un abrazo