Sábado

Rodando por calles

subversivamente asfaltadas

he llegado a un nuevo sábado blanco,

inmaculado, virgen, a estrenar…

Amanecido para seguir

renovando realidades

propias y ajenas.

Este sábado joven e impoluto

inaugura además anheladas primaveras,

sueños de luz y poesía

reinventandos cada año

para generar nueva vida.

Sin embargo, el asfalto

que engullo en estos días

sigue tan gélido

como en febrero

y pesa ya el invierno

en mi cuerpo espástico.

Aun así llegaran los verdes,

los amaneceres estridentes de luz

y los colores multiplicarán expectativas.

Nuevo escenario en el que yo,

tan sólo a un metro del suelo,

seguiré odiando los espejos

(empeñados en el hoy

e ignorantes del ayer),

y rodaré por campos urbanos

testigos silentes de líneas paralelas

que trazan vidas

a golpes de decepciones.

 

¡Mágicos versos los tuyos!

 

es como aprendemos, a golpes de decepciones y fracasos verdad?
De alguna formas tendremos que consolarnos,
diciendo que asi aprendemos,
para eso tenemos nuestro amplio refranero y las frases hechas.
mejor seria aprender de las alegrías, pero bueno,
aquí estamos y hoy luce el sol.

Un abrazo Cristina. Y si molestan los espejos fuera con ellos.

 

Mira, aquí en el espejo del calendario hoy comienza el otoño y sin embargo en el claro espejo de la naturaleza el verano persiste en todo su esplendor, la vida se da revancha ¡Siempre! Abrabesos

 

Encantada de conocer tu bella poesía.
Saludos.

 

Muchas gracias chicos

 

Gracias Rami