Salven a mi patria venezuela

Yo no tengo grandes estudios,
ni partido político, ni religión,
lo que tengo es mi dignidad, un escudo,
y una bandera guardados dentro de mi corazón.

Yo no quiero gastar mi vida en vacilaciones,
ni la quiero gastar criticando,
el amor a mi patria quiero gastarlo,
y demostrarselo trabajando.

Porque asi a mi patria le dejo claro,
que más que su hijo soy su amigo,
porque si yo crezco en mi propia persona,
una parte de mi patria crecerá conmigo.

Si yo le faltara a mis buenos principios,
se mancharía mi dignidad entera,
se marchitaría mi escudo,
y se entristecería mi bandera.

Pero yo sólo soy una gota de agua,
transparente como su verdad interna,
hay millones de gotas de agua como de lluvia,
que forjan la patria que se volverá eterna.

Lo que quiero decir es lo siguiente,
es que existe una idiosincracia en la que confio,
una sola gota de agua ni siquiera moja,
millones de gotas formarán un rio.

Y en cualquier parte del mundo que se encuentre,
una de estas gotas de agua aunque sea un instante,
de nuestra patria, escudo y bandera,
tendrá que ser un digno representante.

Pero ahora mi corazón se encuentra angustiado,
sólo veo tristeza, anarquía y división en estas paginas,
nuestra dignidad, escudo y bandera resquebrajados,
y las únicas gotas de agua que veo son nuestras lagrimas.

Oro negro que simboliza,
la riqueza absoluta en el vaiven de la mente,
sigo considerando en lo mas profundo de mi conciencia,
que la riqueza mas grande está en el trabajo de nuestra gente.

Ahora estamos en suspenso,
y con mucho por hacer en nuestras manos,
sólo con el petróleo como forma de espectativa,
en lugar de avanzar nos deterioramos.

También nuestro sol quedó cubierto,
por una nube que entre nosotros creó tempestad,
y como si fuesemos esclavos sin criterio propio,
nos quiere doblegar ante su única voluntad.

La impunidad esta presente noche y dia ,
y de denunciarla nuestra garganta se gasta,
nuestro digno escudo lleno de melancolía,
junto con nuestra bandera a media asta,

Nos hablaron sobre un mar de la felicidad,
pero eso no es otra cosa que un engaño,
tenemos una patria con un suelo muy rico,
pero en ese mar se lo llevan a puertos extraños.

Ahora nos hablan de una supuesta justicia,
que en el futuro libertad tendremos en abundancia,
nos quieren dar a entender que todo esta bien,
pero le da vida a la intolerancia.

El pueblo muestra su noble paciencia,
y la esperanza queda en silencio convertida,
se piensa que esta todo bajo control,
pero que sólo espere ira contenida.

Nuestras calles sumergidas en cotidiana violencia,
logra que se alarguen los dias y el tiempo se agota,
y como consigue siempre a su favor la tendencia,
hacerlo es fácil, va diciendo que es patriota.

Yo como autor ya no hayo que escribir,
pero puedo decir que de la miseria me niego a ser alumno,
siento tanta tristeza por mi patria,
que sobre este poema me derrumbo.

Pero note una pequeña llama que ardía,
encima de un gran cirio, aunque acorralada se crece,
noté que, aunque su cera se consumía,
sencillamente la llama permanece.

Sencillamente la llama permanece,
porque es un simbolo de nuestra dignidad,
esa llama no es otra cosa,
que un sentimiento profundo de libertad.

Y en silencio gritaré dignamente,
que en el pecho a mi voz se le quiebra el timbre,
que por un tiempo seríamos cuerpos esclavizados,
pero siempre con corazones libres.

En aquél instante escuché un tronar esmerado,
era el relampago del catatumbo,
nos decía que entre tantos caminos cerrados,
en la gloria, patria y esperanza existe un rumbo.

Y el churum merum y el píco bolívar,
se vieron estremecidos en su simiento,
desde su punto glorioso observarán,
de nuestra patria su renacimento.

Todos nuestros simbolos patrios,
estuvieron resguardados bajo el techo de un caney,
todo el tiempo protegidos por un jaguar,
bajo la sombra de nuestro frondoso araguaney.

Y todo el pueblo con sus brazos abiertos,
desde la gran sabana hasta los llanos,
y en solo abrazo todos nos dimos cuenta,
que jamás habiamos dejado de ser hermanos.

De pronto nuestro lucero volvio a ser radiante,
y unos niños entonaron el himno nacional,
con su luz florecieron de nuevo las orquideas,
y en su amanecer escuche cantar a un turpial.

Sólo asi la alegría retornará a nuestros corazones,
y de sentimiento patriótico nuestra alma sera llenada,
nuestro escudo dignamente seguirá cocido,
por siempre en nuestra bandera enarbolada.

Y gloria al bravo pueblo,
gloria a la patria que se renueva,
que viva nuestra patria que siempre fué de todos,
que viva nuestra patria Venezuela.​

 

Precisamente justo hoy por la tarde hablaba con un gran amigo Venezolano y me contaba de las largas filas, de las horas y horas que debían esperar, para conseguir alimento para su familia, no hay pollo, arroz, fideos lácteos, no hay nada, ni pasta dental ni papel confort, es atroz, el lo tomaba con humor, porque él es así muy energético y positivo y cree en Dios.

Solo fuerza para esa tierra Venezolana que hoy sufre, las consecuencias de un régimen mmmmm...
En fin, lo importante es seguir adelante y es de esperar que todo mejore en tu tierra amada, gran relato, felicidades por ese inmenso corazón que llevas.
Bienvenido
Saludos desde Chile, Chiloé.