Se habrán ido

Una amiga me dijo
que ya no hay resignaciones para lamentarse
ni compasiones para mí
que las que solo yo siento.

Es como la pirueta del trapecista
en este mundo de caída libre de la cuerda floja,
siendo yo el trapecista
y mi vida como cuerda
en el punto maximo para caer.

Ya no la denominaré
“recuerdos”,
solo vivencias del presente
como estas nubes
que hoy están
y mañana
sencillamente se habrán ido.
​

 

Los recuerdos de una trapecista:

saber que la vida no es una cuerda,
y aún así creerlo...

sentir que la cuerda no es estable,
y aún así hacer piruetas

entender que esto es sólo un trabajo
y mañana los recuerdos
se habrán ido...

la vida no será una cuerda,

será otra cosa...


Saludos Poetisa