Sed de venganza

La bestia durmiendo en tus adentros,
esperando poder salir,
te seduce, te lleva por un camino
que parece perfecto,
pero sólo sabe mentir.

Manipula tu mente y sus mayores deseos,
los hace impulsos, dejan de ser anhelos.
Cruzas una senda que no debes seguir,
Porque todos saben que la venganza,
en paz no deja dormir.

No mata por fuera, te mata por dentro,
en lo más profundo, donde creiste
que fuera imposible el intento.
Dicen que sabe a gloria,
pero te deja insatisfecho.
Dicen que llena el vaso
de un hombre sediento,
pero sólo lo deja más vacío,
A medida que pasa el tiempo.

Todos aquellos que en su trampa cayeron,
Fenecieron, se olvidaron de lo cierto:
cuando guardas rencor acumulado,
El veneno que bebes invade tu cuerpo,
Y sin piedad, mata al más cegado.