Septiembre de melancolía.

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Hace un día maravilloso de Septiembre, un mes que me encanta, me encanta esa melancolía que se respira, el verano nos ha dejado algo agotados, y ahora esta serenidad es un calmante para el cuerpo y el alma, el sol ya no quema, ahora.. nos acaricia suavemente, los árboles en plena madurez a punto de desnudarse en su letargo invernal se niegan a perder sus hojas y parecen quietos como si en un sólo movimiento se pudieran deshojar, los rosales dándose una segunda oportunidad, temerosos han florecido, y en este puente entre la madurez y la vejez.. queremos agotar hasta el último aliento de vida.

Paseo y observo casi todo, a todo le busco la otra cara de la vida, lo que los ojos no perciben, sé que este día que para mí luce esplendoroso no es para todos igual, y una espina se clava en mi interior, tal vez porque mañana sea yo la que mire al cielo y a pesar de estar completamente azul, para mí esté nublado, pero hoy no quiero pensar en cosas tristes quiero disfrutar de este paseo entre la realidad y la ilusión..soñar sin levantar demasiado los pies del suelo para que el descenso no sea una caída impactante, los niños juegan apurando sus últimos días de vacaciones, los ancianos suplican al sol que no se vaya lejos, y la vida una vez más como una ruleta imparable, comenzará otra etapa en la que muchas cosas morirán para renacer de nuevo con la llegada de la primavera, otras se irán para siempre, mientras eso sucede.. yo hoy me dejo llevar por esta extraña melancolía que a veces nubla mi mirada, viendo la vida pasar.

Téura

 

Genial, es algo de lo que siento, cuando me asomo a la ventana de mi edificio sin motivo alguno, es triste, triste de verdad...


un abrazo desde bogotá.

 

Gracias viktor la nostalgia del otoño es contagiosa..

Un saludo desde Andalucia.