1. Invitado, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"

    !!!Te va a encantar, no te la pierdas!!!

    Cerrar notificación

Sexopia (comedia adolescente) En redacción...

Tema en 'Relatos extensos (novelas...)' comenzado por Elizabeth Thor, 18 de Febrero de 2013. Respuestas: 5 | Visitas: 1752

  1. Elizabeth Thor

    Elizabeth Thor Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    17 de Febrero de 2013
    Mensajes:
    22
    Me gusta recibidos:
    0
    Cap 1: Un extraño cambio

    nuevo día. La joven se miraba al espejo del baño extrañada, se tocaba el rostro con miedo por no saber lo que pasaba, se manoseaba el cuerpo intentando saber lo que había pasado. Definitivamente la chica que se reflejaba en el espejo no era ella, esas pecas en el rostro, ese pelo semi largo de un tono rubio era tan extraño para ella. Se levanto la camiseta y observo sorprendida esos pequeños pechos que no tenían que estar hay. Trago saliva y se metió una mano en el pantalón buscando algo importante. Callo de rodillas entre sollozos sin entender lo que pasaba. Moviéndose lentamente asta el rincón del cuarto de baño intento recordar lo que paso horas mas tarde. Nick miro su taquilla suspirando por a ver dejado atrás el verano, las vacaciones habían pasado demasiado rápido y a hora tocaba volver al instituto. Volver a encontrarse con lo de siempre, sus amigos y los abusones. Tener la apariencia de Nick no era bonito ya que se convertía en la victima perfecta. Un débil delgaducho, de tez tan blanca como la leche y con una apariencia aniñada. Cerró su taquilla y vio a sus mejores amigos acercándose a él. Robert su camarada de palizas y marginación. Este le dio la mano con una sonrisa entre los labios por el rencuentro.


    -Joder Nick, por fin nos encontramos……..ha sido tan cansada esta última semana-Dijo Robert.


    Robert se había pasado la ultima semana de vacaciones arreglando el almacén de la tienda de sus padres. Por sus bajas notas fue el mejor castigo.
    Allí estaba la única chica del trio, la amiga desde la infancia de Nick, Vivian en el mismo barrio y eran vecinos. La chica pasaba mucho tiempo con ellos, disfrutaba salir con los dos chicos. Por alguna razón no congeniaba con las chicas de su edad. Era siempre la voz de la razón entre la mente lujuriosa de Robert y la timidez de Nick.
    Helen poso su cabeza en el hombro de Nick y le miro a los ojos.


    - Mi amor, porque no es posible nuestra aventura amorosa.-Dijo Helen.


    Helen participaba en todas las obras de teatro del instituto ya que soñaba en ser una gran actriz de teatro. Se había pasado casi todo el verano ensayando esos diálogos con Nick ya que deseaba ser elegida. Nick la miro forzando una sonrisa.


    -Sobreactúas cariño-Dijo Nick.


    -No es posible yo soy la nueva Winona Ryder.


    -Que quieres también robar en las tiendas-Dijo Robert entre risas.


    Helen le metió un codazo a Robert por lo que dijo. Nick levanto su mirada y sintió como si todo se parara lentamente. Era ella, era la mujer por la que suspiraba cada día y por la cual sus noches se habían vuelto más interesantes. Suspiro profundamente y la vio pasar con sus amigas. La había visto tantas veces a escondidas, le había observado cientas de ocasiones que se había aprendido cada centímetro de belleza. Era la chica rubia más hermosa del mundo, la de la piel más perfecta y la sonrisa más arrebatadora.


    -Joder con Jessica parece que tenga las tetas más grandes-Dijo Robert.


    Eso hizo que Nick volviera en si, él era incapaz de hablar de ella de aquella manera. Jessica para él era la mujer perfecta y cada suspiro era para ella. Helen miro con enfado a Robert ya que ella era una feminista en potencia.


    -Que pasa Robert solo puedes ver en una mujer sus tetas y su culo-Dijo Helen.


    -Es que hay algo mas?


    Sonó el timbre y los amigos se fueron para las clases, Helen sonrió a Nick enseñándole su redacción sobre el verano:


    -Mira Nick aquí hablo sobre la obra que estado ensayando todo el verano y tu de que as escrito.


    Nick suspiro ya que su verano o por lo menos la ultima semana no fue muy gloriosa.


    -Sobre la pesca dela trucha y soportar el intento de mi padre de hacerse mi amigo.


    -Tu crees que a sido malo, pues no te imaginas como estaba el almacén de la tienda.-Dijo Robert.


    Desde la última fila de la clase Nick observaba el bonito pelo de Jessica, dibujando pequeños corazones en su libreta. Robert intentaba no quedarse dormido por enésima vez y Helen escuchaba impaciente las redacciones de sus compañeros.
    El profesor dijo el nombre de Jessica, Nick sonrió al ver como ella se levantaba. Podía disfrutar de esa dulce voz otra vez.
    La chica miro a la clase, trago saliva y sonrió. Parecía que aquello que iba a leer era mas que una redacción:


    “viaje a San Francisco para conocer a Jordán una amiga que conocí por internet, ella me enseño su bonita ciudad y me abrió los ojos. Me despertó en mi cientos de sentimientos y volvimos a vivir de nuevo como nuestros antepasados los hippies.”


    Robert rio y le susurro algo al oído de su amigo Nick:


    -Eso significa que “Hola Selva negra”.


    Jessica suspiro para decir lo más importante de su redacción:


    “ella me descubrió muchas cosas importantes y sobre todo me enamore de ella. Yo soy lesbiana”
    El silencio sepulcral se hizo con la clase y un pequeño golpe rompió aquel estado. Nick golpeo con la cabeza la mesa, se dio cuenta de dos cosas. Jessica no sabía que existía y que ya no tenia ninguna oportunidad.


    Helen cogió la bandeja de la comida acompañada por Robert, en el comedor solo se hablaba de una cosa, la salida tan prematura de Jessica Carter del armario.


    -Como esta Nick?-Pregunto Helen.


    Robert sonrió, ya que ese momento fue tan divertido. Nadia haba conseguido la atención de la clase de aquella manera.


    -Destrozado, ha pasado de amor imposible a casual paja……..


    Nick estaba sentado en la ultima mesa del comedor, parecía que estuviera apunto de romper a llorar, no podía creer lo que escucho en clase, el amor de su vida era mas inalcanzable a un. Intentaba solo escuchar sus pensamientos. Ya que solo podía escuchar la gente cuchicheando que a hora Jessica era lesbiana.
    Sintió el abrazo comprensivo de Helen y con ojitos de pena miraba a su amigo, intentando que volviera a sonreír. Cientas de veces Nick le decía que esos ojitos le recordaban al gatito de los cartoon de la Warner.


    -La gatita quiere que vuelvas a sonreír-Dijo Helen.


    Robert le dio un mordisco a su bocadillo y supo como dar ánimos a su amigo:


    -Quieres olvidarla? Hay un montón de mujeres como peces en el mar, sabes la forma perfecta para olvidarla, emborracharse hasta vomitar.


    A Helen le pareció algo tan estúpidamente macho, que intento dar otra idea:


    -Porque no una noche de amigos viendo películas y comiendo palomitas.


    Nick les miro y por unos segundos apretó con fuerza sus dientes, necesitaba olvidar aquello, apretó con fuerza su tetrabrik de leche hasta hacer que reventara.


    -Robert compra las cervezas que pillaremos un buen ciego……


    Helen bajo la cabeza suspirando:


    -Creo que yo paso.


    Nick se levanto y le dio la mano a su amigo:


    -Esta noche en mi sótano, cervezas y películas guarras.


    Helen suspiro nuevamente sabiendo que se pasaría el fin de semana sola, cogió su libreta y dibujo un corazón. Puso su nombre y el de Nick. Para ella era otro amor imposible.
    La ultima hora de la noche, era una noche perfecta para olvidar el alcohol ayudaba para eso. Las cervezas tenían a los dos chicos sumergidos en sus borracheras, viendo el mundo de otra manera. Nick intentaba olvidar lo que paso. Veían en la televisión alguna de las cintas guarras de Robert. Su amigo soltaba sus comentarios machistas a todo volumen. Eso conseguía que Nick gritara con todas sus fuerzas a la televisión, el alcohol hacia que despertara el hombre que tenía dentro:


    -¡¡¡Dale a esa guarra!!!-Grito Nick.


    A la última hora de la noche, la televisión seguía encendida mientras que los dos chicos estaban semi dormidos. De las manos de Nick se resbalo la cerveza, eso hizo que se despertara viendo el panorama.
    Se levanto como pudo arrastrando la borrachera, miro a su amigo y le grito con la lengua pegada al paladar.


    -Yooo, me voy a mi casa-Dijo Nick.


    Robert seguía durmiendo profundamente ya no habría nadie que fuera capaz de despertarle. Nick le tiro la lata de cerveza y subió por las escaleras que conducían al sótano, tenia suerte al llegar a casa podría dormir asta las tantas sus padres estarían todo el fin de semana fuera.
    Al llegar a casa se conecto a internet y comenzó a escribir en su blog. No sabia lo que escribía sus sentimientos estaba tan borroso.


    “¿Si fuera una mujer me amarías Jessica?”


    Se desplomo encima del teclado quedándose profundamente dormido.
    La luz del día entró por las ventanas, bañando todo el hogar por una armoniosa luz. Nick se sentía roto por todas partes, era la dura resaca. Al abrir los ojos vio como largo pelo caía sobre su rostro, extrañado lo toco y pudo observar como sus manos eran pequeñas y frágiles. Su sudadera parecía que le iba un par de tallas más grandes. Al levantarse sintió como sus pantalones se caían, intentaba andar hacia el servicio para descubrir lo sucedido. Comenzó a toser y se llevo la mano a su garganta. Sintió una extraña suavidad en su piel y que faltaba su nuez. Trago saliva sin entender nada:


    -Que coño.


    Al escuchar su voz se sorprendió totalmente ya que no la reconocía. Parecía la de una mujer…


    .....................................................................................
     
    #1
    Última modificación por un moderador: 21 de Febrero de 2013
  2. Elizabeth Thor

    Elizabeth Thor Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    17 de Febrero de 2013
    Mensajes:
    22
    Me gusta recibidos:
    0
    Cap 2: Y tu eres Erica

    Nick intento pensar que le había pasado, porque era a hora una mujer, que le había pasado la noche anterior. Era incapaz de encontrar una solución, se volvió a levantar y se miro al espejo. Acariciaba su rostro y su pelo rubio semi corto. Trago saliva y se levanto la sudadera para verlas otra vez, hay estaba el sueño de cualquier hombre.

    -Bueno puede ser que no este tan mal.

    Sus dedos estuvieron a un milímetro de tocarlas de comenzar a jugar con ellas, asta que escucho como sonaba el timbre de su casa.

    -Pero quien puede ser a hora.

    Robert y Helen decidieron visitar a un abatido Nick, sus amigos tenían que estar con el en estos momentos, sabían que tenia el corazón roto y querían ayudar al pobre.

    -Joder soy un tío y a mi que me importa los sentimientos de Nick-Dijo Robert.

    -Robert, seguro que Nick necesita a hora más que nunca a sus amigos, es que nunca te han roto el corazón.

    -A mi me han roto las pelotas de una patada, hay mucho novio celoso.

    -No se lo que debe ser una patada en esas partes, pero seguro que es como si te rompieran el corazón.

    Por la mirilla de la puerta Nick veía con miedo a sus dos amigos, no se atrevía abrir la puerta. Como podrían entender que a hora una mujer. Se puso la capucha de la sudadera y trago saliva, buscaría la mejor manera de contárselo, contarles algo que no entendía.

    Al abrirse la puerta Robert y Helen vieron a su amigo con el rostro tapado por su capucha.

    -Hola chicos-Dijo Nick poniendo la voz ronca.

    -Valla pasada de fiesta privada que nos peguemos ayer, esa voz es la prueba-Dijo Robert.

    Los dos chicos entraron en la casa de Nick y se sentaron en el sofá. Helen no dejaba de mirar a Nick, le parecía tan rara su forma de andar, su ropa le iba tan grande.

    -Si, chicos sois unos salvajes. Estas cosas del corazón se arreglan hablando tranquilamente y no buscando un coma etílico.

    Nick se sentó en la mesa de centro frente a ellos, trago saliva y se miro esos pequeños y delicados dedos.

    -Es que chicos a hora mismo tengo un problema mas grave-Dijo Nick.

    -No será para tanto-Dijo Robert.

    Se abrió la capucha y les enseño en lo que se había transformado, enseño en todo su esplendor la chica que se había transformado.

    -Este es mi problema soy una mujer.

    Helen se levanto del sofá asustada, no conocía aquella mujer ni entendía porque vestía como Nick.

    -Tu quien eres?-Pregunto Helen.

    Robert comenzó a reír inventándose su propia historia:

    -Dime la verdad, as asesinado a Nick y lo as enterrado en el jardín y a hora estas de coña con nosotros.

    Nick se esforzaba para que ellos lo comprendieran, se acercó a Helen e intento cogerle la mano, esta le dio un fuerte empujón para que se apartara de ella. Miro a Robert y lo volvió a repetir:

    -Soy Nick, soy una mujer no lo entendéis………

    Apretó los dientes e intento pensar alguna manera para que ellos le creyeran, pensó en algo que el Nick hombre solo sabría. Señalo a Helen:

    -Te enamorasteis de John Sanders un jugador de futbol del colegio y él te dejo por Jennifer Welters, me lo contestes llorando en tu casa.

    Helen se quedo pensativa sin creer lo escuchado ya que Nick era el único que lo sabia, entonces aquella chica podría ser?

    Señalo a Robert:

    -Tu Robert as visto casi cien veces Love Story ya que te encantan las historias románticas.

    Helen cayó de rodillas sin creer lo que pasaba:

    -Nick que te paso-Dijo Helen.

    Nick era incapaz de contestar aquellas palabras, sintió como su amigo Robert le estaba tocando los pechos lentamente.

    -Si es una mujer tiene las tetas pequeñas y juguetonas como a mi me gustan.

    Helen suspiro:

    -Nick te voy a dar la primera lección como mujer, da un pisotón.

    Nick dio un pisotón y Robert dolorido se cogió el pie.

    -A hora da un codazo con todas tus fuerzas-Dijo Helen.

    Nick dio un codazo impactando en el rostro de Robert dejándolo tirado en el suelo.

    Helen abrazo a Nick, intentando darle algo de apoyo en ese extraño momento. Los tres chicos estuvieron un par de horas intentando completar el puzle que fue aquella noche.

    -Pero que fue lo que te paso esta noche-Dijo Helen.

    -No lo se, pero hincharme de hormonas y cambiarme de sexo en tres horas no creo.-Dijo Nick.

    -Tampoco fue la cerveza porque si te tomas las de ayer lo máximo es dejarte ciego.-Dijo Robert.

    Helen abrazo nuevamente a Nick y le acaricio el rostro con una sonrisa:

    -Todo tiene solución, ya veras que todo se pasa.

    Nick triste miro al suelo y trago saliva:

    -Me enseñaras a ser una chica.

    -Claro yo soy una excelente actriz, soy la nueva Angelina Jolie-Dijo Helen.

    -Que aras operarte los morros y quedarte anoréxica?-Dijo Robert entre risas.

    Robert les miro con una gran idea:

    -es fácil te pones una mini falda y una camiseta de tirantes, con unos zapatos de tacón de aguja y di eso “soy una furcia, tía ósea”.

    Helen estuvo en silencio ante aquellas palabras, una vena de su cuello comenzó a latir lentamente, se fue recogiendo la manga. Sabía lo que tendría que hacer en aquel momento. Nick se miro los dedos muerto de vergüenza, asta pensando que no tendría ese tipo para ir vestida así, asta que escucho un fuerte golpe. Al levantar la cabeza Robert tenía un gran chichón en la cabeza.

    -Sabes voy a buscar ropa mía y probamos tu estilo, no todas las chicas se pueden vestir igual.-Dijo Helen.

    Helen trajo un montón de ropa de todas clases y se encerró en la habitación con Nick. Entre sus cajas comenzó a sacar ropa negra y espero a que la nueva chica se lo probara. Le miro con una sonrisa y le señalo lentamente. Era una estúpida siguiéndola llamando Nick cuando ya se notaba que todo había cambiado:

    -Sabes cariño, a hora te llamara Érica, ya es hora que tengas el nombre de mujer, por el momento asta que no vuelvas a ser un hombre te llamare así.

    Nick asintió con la cabeza:

    -Érica, me gusta ese nombre.

    Helen salió antes de la habitación señalo la puerta ante la salida de Érica, ella salió vestida de de negro, como una gotica. Aparte el maquillaje negro le daba un toque muy fúnebre. Miro a Robert y Elena:

    -Que pasa, soy Érica soy gótica me mola Marilyn Manson y estoy siempre triste quiero cortarme las venas.-Se quedo pensativa-Porque me han quitado las galletas.

    Robert levanto la ceja y comenzó a reírse, se acercó a Érica sonriendo:

    -Te vas a fiar de una actriz tan mediocre como Helen? Que queriendo enseñarte a ser gótica pareces una mezcla entre gótica y emo.

    Le susurro al oído algo a Érica y esta volvió a entrar en la habitación, Helen se acercó a Robert y le retorció el brazo:

    -Lo que soy yo es una gran actriz.

    Érica salió con una camiseta de tirantes y una faldita, muerta de veguenza no daba ni un paso. Entre las manos llevaba dos pompones. Ante una sorprendida Helen, Érica comenzó a menear los pompones sin cesar:

    -Dame una V, dame una E, vergüenza………joder.

    Muerta de miedo se escondió tras Helen:

    -No se como las animadoras pueden ir con esas falditas, solo ponérmelas me muero de vergüenza y eso de no llevar bragas es tan humillante.-Dijo Érica.

    Helen se toco la cara muy enfadada mirando a Robert:

    -Animadora y encima sin bragas??

    -Eso espero que ni una animadora lleve bragas.-Dijo Robert.

    Helen miro a los ojos a Érica y le dijo algo lentamente:

    -Te pondrás mi ropa, seguro que ese el estilo que te va.

    -Claro hagamos que parezca una lesbiana más-Dijo Robert.

    Érica fue al cuarto mientras escuchaba como los muebles de comedor se estrellaban sin cesar.
     
    #2
  3. Elizabeth Thor

    Elizabeth Thor Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    17 de Febrero de 2013
    Mensajes:
    22
    Me gusta recibidos:
    0
    Cap 3 Robert y Rachel


    Érica respiro profundamente antes de enfrentarse nuevamente al espejo, se había puesto la ropa de Helen y esta vez parecía una chica normal. Se acarició el rostro pensativa, pensó en lo que era a hora, una mujer. Era extraño pero eso era lo que era. Se miro sus pequeñas y débiles manos. Su rostro apareció una bonita sonrisa, podría a hora tener una gran oportunidad con Jessica.

    -si a ella a hora le gustan las mujeres y yo soy un ornitorrinco-Sonrió.-A hora soy una chica podría intentarlo.

    Sonrió al espejo intentando ser lo más coqueta e irresistible, poso una mano en su cintura y con un dedo toco el espejo:

    -Yo no soy mala……es que me han dibujado así.

    Miro su escote y suspiro:

    -Espero que las mujeres no se fijen en las medidas, no tengo una 120 como Jessica Rabit.

    Se abrió la puerta y salió Érica, ando lentamente como una modelo, para que sus amigos observaran como le quedaba el modelito. Helen estaba contenta, ya parecía una chica normal y corriente, era increíble que a otra mujer le fuera también su estilo.

    -Esta preciosa.

    Érica se miro la camiseta y se toco el pantalón:

    -Me va bien pero me aprieta el pecho y me va grande por el culo.

    Helen se quedo sin palabras cuando Robert se comenzó a reír.

    -Sabéis chicos podría intentarlo esta vez-Dijo Érica.

    -Por fin algo de cordura quieres ser etero, ven conmigo y nos pegamos el lote-Dijo Robert cogiéndola del brazo a Érica.

    -No, no eso nunca prefiero beber lejía con salfuman, era otra cosa.-Dijo Érica.

    -Normal con el espécimen que tenemos aquí a cualquiera le quita las ganas de ser etero-Dijo Helen.

    -Recuerdo como si fuera ayer, Jessica dijo que le gustaba las mujeres y por fin tengo una oportunidad.

    Robert se toco la nariz pensativo:

    -Érica tendrías que aprender muchas cosas para liarte con Jessica, venga os morreáis tu y Helen-Sonrió-Os podéis meter algo de mano, una lesbiana como Helen te puede enseñar.

    Érica se puso roja de vergüenza mirándose los dedos:

    -Yo es que?-Dijo Érica muerta de vergüenza.

    Helen le dio un fuerte golpe a Robert dejándolo tirado en el suelo. Esta cogió a Érica por los hombros y le iba a decir algo muy importante. Nunca tuvo tiempo de contárselo a su mejor amigo:

    -Desde hace varios años Jessica, estudia conmigo teatro-Se quedo pensativa-Nunca te lo dije porque me hubieras obligado a preguntarle “si le gustabas” no me gusta escuchar como te hubiera humillado.

    Érica respiro profundamente y forzó una sonrisa:

    -Sabes Helen como Nick no hubiera tenido ninguna oportunidad. Pero como Érica puede ser que ella me quiera, la quiero conocer como Érica. Por favor.

    Helen suspiro y cogió el móvil, llamaría a Jessica para saber donde estaba. Robert se levanto y le dijo algo importante a Érica, mirando los pechitos:

    -Sabes que un gran poder conlleva a una gran responsabilidad-Dijo Robert volviendo a tocarle los pechos a Érica-Si quieres te enseño a besar.

    Érica le dio un manotazo a Robert para que se las soltara y ella misma se las toco:

    -Son mías y yo soy la única que puedo disfrutar de ellas, podría preguntarle a Helen que me enseñe hacerte algún fatality-Dijo Sonriendo Érica.

    Robert suspiro y se metió las manos en los bolsillos, Helen colgó el móvil. Ya sabía donde estaría Jessica:

    -Jessica estará en el centro comercial con unas amigas, le dije que iría con una amiga mía-Dijo señalando a Érica.

    Los tres chicos salieron a la calle con dirección al centro comercial, Érica miraba a su alrededor, a un se sentía rara con su nuevo cuerpo. Más rara se sentía con cosas que descubría a su alrededor, cosas que jamás se había fijado:

    -Veo esos posters, esos nuncios y veo que las mujeres solo somos un trozo de carne para los hombres, as visto como nos viste.-Dijo Érica.

    Helen respiro profundamente y poso su mano en el hombro de su amiga:

    -Ese es el primer paso del feminismo amiga, darte cuenta como es el mundo.
    Robert se rio:

    -Eso es que no puedes pensar, ese sujetador te impide que te llegue la sangre a la cabeza.-Robert soltó una carcajada-Pero no as visto esa pedazo tía que sale en aquel cartel, por ella me compraba el coche.

    -Hay esta la respuesta cariño, nosotras somos unas mujeres inteligentes de nuestro tiempo y hay esta el típico mono que piensa con el rabo.-Dijo Helen.

    Al llegar al centro comercial Érica respiro lentamente, le parecía las cosas a un más grande de lo que eran cuando era un hombre.
    Desde la primera planta se podía ver a toda la gente que había acudido al centro en aquel día festivo, desde allí vieron a Jessica junto a sus amigas. Los ánimos se rebajaron un poco al ver que junto a ellas estaba Lilith Tyler, la temida chica del instituto. Solo llevaba dos meses en el colegio y aparte der la hermana de Steve Tyler ya era famosa por su mal genio.

    -Valla por dios están con Lilith, yo tendría cuidado con ella chicas-Dijo Robert.

    -Que pasa con ella?-Pregunto Helen-Veo que es una mujer como cualquiera.

    -No as visto ese físico, musculado de años de gimnasia y encima algunos profesores ya le han denunciado por destrozarle sus coches.

    Robert le dio un leve codazo a Érica para que mirara:

    -Fíjate-Dijo Robert.

    -Es Hermano de Steve Tyler.

    En ese momento Helen se quedo como atontada aislada de todo y una sonrisa apareció en su rostro, casi se le caí la baba.

    -Fíjate a todas las chicas le pasa lo mismo, piensan en Steve y recuerdan sus clases de baloncesto y en su cuerpo sudado, si pensaran en mi y en ti cuando eras un hombre se le revolvería las tripas.

    Helen meneo la cabeza para volver en si:

    -Pero si es una chica no me fastidies que no harías el amor con ella Robert, a ti te gusta cualquier cosa.-Dijo Helen.

    -Posiblemente-Dijo Robert.

    A Robert se quedo sin palabras al ver aquello aparecer, estaba allí y le daba demasiado miedo que le viera.

    -Joder Rachel esta hay-Dijo Robert.

    -No crees que es increíble pero ella es la nica mujer que le puede querer y Robert solo sabe salir corriendo.-Dijo Helen.

    -No lo entiendo pensaba que siendo mujer seria mas lista, pero no lo entiendo-Dijo Érica.

    -Yo me piro-Dijo Robert.

    Robert salió corriendo buscando un sitio para esconderse, Rachel era una chica de una bonita sonrisa y de una mirada risueña, de un bonito pelo castaño. Pero tenía un pequeño defecto. Rachel saludo a Helen y Érica.

    -Holas chicas, había visto por aquí o eso me parece a Robert, sabéis me muero de ganas de hablar con el. Tú Helen eres su mejor amiga y eso significa que somos buenas amigas tú y yo. Robert es un buen chico y sabéis me pase por la tienda de animales donde trabajan sus padres para verlo, pero no estaba. Sabéis yo tuve un loro que se llamaba Marlon Brandon y yo cada mañana le hablaba pero un día sufrió combustión espontanea, eso es posible para un pájaro?

    Esa era Rachel una chica que no dejaba de hablar, podría estar hablando durante horas sin cansarse. Miro Helen y sonrió:


    -Tu Helen eres una buena persona me caes muy bien, no eres como mi abuelo. Le quiero pero hace cosas muy raras, cada vez que le voy a ver. Mi querido abuelito se quita el sonotone, porque lo hace si soy su nieta y tengo una voz perfecta. Le quiero mucho-Miro a Érica- tu quien eres? Quieres algo con mi Robert. Un chico tan amable y cariñoso, recuerdo el día que lo vi por primera vez fue en verano. Recuerdo que nunca había visto un chico tan guapo, siempre quise hablar con el pero parece que desaparece cada vez que yo aparezco. No lo entiendo y tu. Espero que no seas su novia, porque seremos enemigas-Dio una leve palmadita en la espalda de Érica-Es broma yo lo compartiría.

    Rachel levanto su mirada, parecía que lo vio. Parece que vio a su querido Robert saliendo de una de las tiendas del centro comercial.

    -Bueno chicas os dejo, e visto a Robert.-Dijo Rachel.

    Comenzó a correr para cogerlo:

    -Hola Robert aquí estoy yuju.

    Helen miro a Érica y le pregunto:

    -Veamos, vamos a ver a Jessica. Dime que le dirás.

    -No lo se tengo la cabeza llena de loros y de abuelos con sonotone. No se he sido una mujer siempre.
     
    #3
    Última modificación: 19 de Febrero de 2013
  4. Elizabeth Thor

    Elizabeth Thor Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    17 de Febrero de 2013
    Mensajes:
    22
    Me gusta recibidos:
    0
    [h=1]Cap 4: Lilith eres mala. [/h]
    Rachel fue tras Robert o eso le pareció a ella. Pero la pobre es tan torpe que se tropiezo con una papelera y cayo de cabeza. Sobresalen solo sus piernas, no puede salir:


    -Zambombas sacarme de aquí, no puedo salir. Estaba tras Robert y caí de cabeza. Pero esto que es parece un sándwich de mayonesa y parece que esta pasado. Que asco, eso me recuerda el día que cuando estaba hablando me trague una mosca, fue asqueroso pero sabia a pollo……alguien me escucha. Sacarme de aquí.


    Helen cogió de la mano a Érica, ella estaba muerta de miedo. No sabia que decir ni como comportarse. Allí estaban las chicas sentadas en un banco.


    -Hola Jessica soy Helen que tal?-Dijo Helen.


    Las chicas se saludaron y Helen le presento a Érica:


    -Mira esta es mi amiga Érica, es nueva en la ciudad. Ha venido de muy lejos-Helen se quedo pensativa-Ha venido de Australia y esta pasando unos días en mi casa.


    -Hola Érica soy Jessica, cualquier amiga de Helen es mi amiga. Sabes esta chica será una gran actriz, que casualidad Érica eres australiana yo siempre soñé ir.


    Érica trago saliva y pensó en cualquier cosa que supiera de Australia:


    -Te encantara Australia, esta lleno de canguros, koalas y nunca nos aburrimos por que los dingos nos quitan a nuestros bebes.


    Jessica se quedo perpleja y miro a su amiga Helen:


    -Helen vente quiero enseñarte unos vaqueros estupendos-Dijo Jessica.


    Érica se quedo sola por unos instantes, como una chica mas se sentó con las demás amigas de Jessica. Al sentarse intento cruzarse de piernas, pero cada vez que lo intentaba se caía del banco.


    -Hola chicas soy Érica, una buena amiga de Helen.


    Lilith se le quedo mirando forzando una sonrisa, parecía que a primera vista Érica no le había caído del todo bien. Se sentó a su lado y la miro de arriba a bajo. Érica se quedo casi sin palabras ya que estaba intimidada por Lilith.


    -Soy Lilith y tu de que agujero as salido?-Pregunto Lilith.


    -No vengo de ningún agujero soy australiana ya sabes canguros y koalas.


    Érica sonrió e imito a un canguro poniéndose las manos en la cabeza, pero veía el rostro de Lilith y parecía que no le hacia gracia.


    -Dime que es lo que mas te gusta de por aquí “Érica”.-Dijo Lilith.


    Érica trago saliva y pensó en hablar de chicos, en los retazos de hombre que le quedaban a Érica pensaba que las chicas hablaban siempre de los chicos.


    -Si sabes lo que me gusta de la ciudad, conocí a un chico estupendo. Que es tan guapo se llama Nick, creo que me quedare mas tiempo por el.


    Ninguna chica hablaba esperando que la violenta Lilith dijera la primera palabra. Esta le lanzo a Érica un vaso de agua a la cara:


    -Tu Nick siempre recibe palizas de mi hermano y de sus amigos. Espero que la calentura se te haya bajado bonita.


    Érica se quedo sorprendida las chicas no son malas, no son violentas. Porque se comportaba así Lilith con ella. Suspiro y pensó que ni de mujer se libraba de los matones.
    Lilith se dirigió otra vez a Érica y le cogió fuertemente del brazo:


    -Perdóname Érica, es que tengo un mal pronto. Vallamos al servicio y te secas un poco-Dijo Lilith.


    Érica forzó una sonrisa, no creía que se pudiera escapar de Lilith. Se notaba las horas de gimnasia. Asta tenía más músculos que ella y asta de cuando era Nick.


    Al llegar al servicio Érica se miro al espejo y fue cogiendo papel del váter que le fue dando Lilith:


    -Dime que es lo que te gusta tanto de “Nick”-Dijo Lilith.


    Érica tartamudeo sin saber lo que decir ante la machorra de Lilith.


    -Pues es un chico muy agradable, tan simpático como sensible. Siempre te escucha con una sonrisa en los labios.


    Robert salió por la salida de emergencia para tirar unas cajas a la basura. Para escapar de Rachel se había escondido en la tienda de sus padres. Allí tuvo que limpiar la jaula de los gatos. Tiro a la basura la arena de los gatos y escucho unos extraños ruidos. Metió s cabeza en el gran container y vio a Érica tirada.


    -Que te paso Érica?


    -Robert sácame de aquí por favor.


    Érica comenzó a limpiarse la basura de sus hombros y Robert comenzó a reírse:


    -No fastidies que asta siendo mujer atraes a los abusones.


    -No lo entiendo Robert estaba hablando de Nick y esa machorra de Lilith me cogió y me tiro al container.


    Helen y Jessica volvieron a los bancos en busca de Érica. Solo vieron como el grupo de Lilith se iba.


    -Lilith as visto a Érica-Pregunto Jessica.


    -Y yo que se habrá vuelto a Australia.
     
    #4
  5. Elizabeth Thor

    Elizabeth Thor Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    17 de Febrero de 2013
    Mensajes:
    22
    Me gusta recibidos:
    0
    Cap 5: Cambiar y volver a cambiar


    -Mira quien me he encontrado en la basura-Dijo Robert.


    Érica se intento quitar la basura de sus hombros. Jessica y Helen se acercaron a ellos.


    -Pero que te ha pasado Érica-Pregunto Helen.


    -Esa abusona de Lilith no le caí bien, me tiro al container junto a la basura.-Dijo Érica.


    Jessica poso su mano en el hombro de Érica, le sabía mal que una mala chica como Lilith le hubiera hecho eso. Pero siempre tenia que estar arreglando los follones que armaba Lilith al fin y al cabo también era su amiga.


    -Sabéis Érica y Helen podréis veniros esta noche a una fiesta solo para chicas en mi casa-Dijo Jessica.


    Helen sintió como si alguien le diera pequeños tirones de la manga de su blusa, Érica la miro ilusionada por escuchar aquello de una fiesta. Helen suspiro y asintió con la cabeza:


    -Allí estaremos-Dijo Helen.


    Jessica se fue a comprar unas cosas antes que cerraran las tiendas, dejando a las dos chicas con Robert. Este se acercó a Érica y le sonrió:


    -Érica, Érica no sabes lo que es una fiesta de chicas, una fiesta de pijamas.


    Érica trago saliva:


    -No se lo que es una fiesta de pijamas.


    -Solo imagina Érica, chicas reunidas en una habitación, os mirareis los pechos para saber quien las tiene más grandes. Os aréis cosquillas y abra pelea de almohadas. Jugareis a la botella y os besareis. Al final chica con chica y toda la noche.


    Érica se puso colorada y una gota de sangre se resbalo por su nariz, Helen miro a Robert enfadada:


    -Pero que narices dices Robert?


    -Al menos todas las películas que he visto acaban de la misma manera y como abra dos lesbianas en esa fiesta estoy seguro que acabara de esa manera.-Dijo Robert.


    Helen le dio un fuerte golpe a Robert dejándole tirado en el suelo, Después se soplo el puño ya que le salía humo tras el fuerte puñetazo.


    Érica miro al suelo al sentir un tirón, vio como Robert intento levantarse:


    -Érica usa el twitter e infórmame de lo que hacéis……..por favor.


    La fiesta de Jessica era muy animada, Érica estaba observando a las chicas como bailaban con la música o se hacían las uñas. Era la primera vez que estaba con tanta mujer. Una de las chicas de la fiesta se acercó a Érica y le puso algo de perfume:


    -Te gusta es mi olor preferido-Dijo la chica.


    Érica olio profundamente el perfume, sintió un hedor a rosas pochas, puso mala cara y prefirió salir al balcón pare respirar un poco.
    Al salir otro olor le llego a su nariz olía a marihuana, miro a su alrededor y vio a Jessica sentada en una silla fumando tranquila. Ella se levanto y se acercó a Érica.



    -Seguro que las australianas vivís en otro mundo, no sois tan malas como las americanas, sabes lo que cuentan de mi?-´Dijo Jessica.


    Érica negó con la cabeza:


    -Que dicen de ti Jessica?


    -Por ser una mujer liberal y sin sentirme atada a los prejudicios de la sociedad yo hable en el colegio de mi lesbianismo.


    Jessica bajo sus ojos rojizos por culpa del porro y acaricio el rostro de Érica, le sonrió:


    -Sabes podría enamorarme de cualquiera, asta de una bonita chica australiana.


    Érica vio como los morritos de Jessica se disponían a besarla, ella cerró sus labios y se preparo para el mejor momento de su vida. La puerta del balcón se abrió y apareció Helen con un pijama en sus manos:


    -Mira Érica espero que te guste este pijama de mariposas.


    Jessica sonrió y prefirió entrar en la fiesta. Érica miro enfadada a Helen:


    -Maldita se Helen casi me besaba-Dijo Érica.


    Érica entro a la fiesta dejando a Helen. Esta respiro profundamente viendo en un cenicero un porro:


    -Jessica ya veo de donde viene tu fase de lesbiana.


    En la fiesta una de las chicas quito la música y enseño unos dvds:


    -Chicas tengo unas películas.


    Jessica la miro con los brazos cruzados:


    -Que película son?-Pregunto Jessica.


    -El capitán américa y linterna verde-Dijo la chica.


    Érica miro a Helen extrañada y le susurro algo al oído:


    -A las mujeres también os gustan las películas de súper héroes?


    -No es que sean de súper héroes es que salen Chris Evans y Ryan Reynolds.


    Una de las películas había comenzado, las chicas cuchicheaban cada vez que Salía el actor que les gustaba. Jessica estaba en silencio y Érica observándola sin cesar, en su rostro se veía el amor que sentía. Helen la miro y noto esa mirada. Por unos momentos se murió de envidia, cogió un cepillo y forzó a Érica que la mirara:


    -Sabes una cosa Érica vamos hacer una cosa muy americana, cepillarnos el pelo. Tú tienes un bonito pelo rubio.


    Helen sabia que dentro de Érica a un seguía latiendo el corazón de su querido Nick. No quería que le hicieran ningún daño.


    -Sabes Helen casi me besa, me sentí tan cerca de ella-Dijo en voz baja Érica.


    -No te tendrías que hacer ilusiones, me escuchas Érica-Dijo Helen.


    Ultima hora de la noche las chicas estaban dormidas profundamente. Érica se levanto de su saco de dormir y se acercó a Jessica y la volvió a observar. Ella quiso en lo más hondo de su corazón que esa mujer le hubiera querido como hombre.


    -desearía ser un hombre para saber si tu me amarías.


    Érica comenzó a sentir mucho calor, en su saco de dormir. Por unos instantes sintió como si ese pijama le estuviera asfixiando. Muerta de calor fue al servicio, intentando no despertar a nadie y pasar en silencio. Al encender la luz vio algo que le sobrecogió. Volvía a ser un hombre, podría ser una alegría pero en el sitio donde estaba era una pesadilla. Encima con ese pijama de mariposas que le iba tan estrecho. Encima marcando paquete de una forma exagerada.
    Intento pensar lo que podría hacer, como podría escapar de aquello. Miro a su alrededor y vio al final del cuarto una ventana. Eso fue lo mejor que le podía pasar. Esa seria su salida. Volvía a intentar pasar en silencio entre las chicas. Cuando estaba abriendo la ventana, se escucho un ruido, la misma ventana estaba oxidada y rechinaba.
    Una de las chicas se despertó cogiendo una linterna y cuando vio a Nick comenzó a gritar. Las chicas del cuarto se despertaron y comenzaron a gritar. Le comenzaron a lanzar cosas.


    -Hay un chico, seguro que nos quiere robar la ropa interior-Grito una de ellas.


    Helen se despertó a un casi despierta y pudiendo escuchar esos gritos, pero estaba casi tan dormida que al principio no le hizo mucho caso:


    -Un chico mmm que bien-Dijo Helen casi dormida.


    Se dio cuenta con una gota de sudor en su frente, el único que era un chico o lo fue hace un par de horas fue Nick.


    -Nick-Grito Helen.


    Al mirar la ventana vio a su amigo en frente de la ventana intentando abrirla y recibiendo coginazos de las chicas. Una de las chicas le dio en toda la cabeza con la plancha, haciendo que Nick callera rompiendo la ventana. Las chicas miraron por la ventana pudiendo ver como el supuesto violador salía corriendo. El chico salió corriendo con todas su fuerzas, escondiéndose entre los arboles ya que la policía estaba patrullando. A esas horas como podía explicar porque llevaba ese pijama o ropa interior femenina.

    Consiguió llega a su casa, respiro profundamente apoyado en la puerta asta que escucho como picaban a la puerta. Al abrirla vio a su amiga Helen, que al ver que volvía a ser un hombre le abrazo:


    -No se si emocionarme por volver a verte como hombre o partirme de risa por ese pijama.


    Helen le acaricio el rosto al ver que tenía varios arañazos:


    -Que graciosa Helen.


    La chica entro en casa, Nick se hecho un vaso de leche he intento tomárselo para tranquilizarse. Helen estaba confusa, como se volvió a transformar otra vez en hombre.


    -Nick como volviste a ser un hombre?


    Nick se quedo pensativo he intento repasar todo lo que paso aquella noche.


    -Solo pedí volver a ser un hombre………


    Nick se quedo pensativo, parecía que había descubierto el secreto. Respiro profundamente mirando a Helen:


    -Podría ser que al decir “quiero ser una mujer”


    Su cuerpo se volvió a transformar nuevamente en una mujer, Nick se dio cuenta que podría transformarse a voluntad en hombre o mujer.

    Continuará...
     
    #5
    Última modificación por un moderador: 21 de Febrero de 2013
  6. Elizabeth Thor

    Elizabeth Thor Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    17 de Febrero de 2013
    Mensajes:
    22
    Me gusta recibidos:
    0
    Cap 6 Nueva vida


    “Recapitulemos hace casi una hora salte por una ventana, Salí corriendo por los jardines de las casas con un pijama femenino de mariposas puesto. Hace un par de horas descubrí que me había transformado en mujer, pensaba que seria para siempre pero me volví a transformar en hombre en el peor de los momentos. Creo que las chicas de la fiesta de pijamas siempre recordaran que un hombre se coló en su fiesta. Al llegar a mi casa descubrí que con mi pensamiento podría controlar mis transformaciones, que podría ser hombre o mujer cuando yo lo deseara. Helen fue la primera persona que pudo ver lo que podía hacer y en ese momento nos quedemos mirando el uno al otro”

    Nick miraba sus manos pequeñas y femeninas, estaba alucinando ese gran cambio en su vida lo podría controlar. Con tan solo pensarlo podría ser hombre o mujer, Helen se le quedo mirando sonriendo. Eso estaba muy bonito pero siendo Nick un hombre, aquel dichoso poder solo le traería actos muy sucios o eso pensaba Helen. Ella entro a su casa sonriendo:

    -Veo que puedes ser un hombre o mujer cariño, por eso no te puedo dejar solo. Al saber las guarradas que arias.

    Nick se toco los pechos y suspiro, enfadado cerro la puerta:

    -Maldita sea a hora que podría divertirme un poco.

    Al acabar ese largo fin de semana, volvió a sonar el despertador nuevamente para dar la bienvenida al lunes, dichoso principio de la semana. Érica intento apagar el despertador, se levanto arriscándose la cabeza bostezando. Se froto el estomago y fue al servicio. Las ropas de chico siempre le iban tan enormes, le sobresalía un hombro por el cuello de la camiseta. Eso se arreglaba fácilmente volviéndose a transformar en chico. Nick cogió su cartera y salió de la casa. Allí le estaba esperando Helen como cada mañana para ir al instituto. Al verle le dio una bolsa de ropa:

    -Gracias Helen.

    -Sé que esta ropa te ira perfecta para Érica, tu confía en mi y en esa estudiante nueva Australiana. Te podrás acercar más a tu amor platónico.

    Al llegar al instituto los dos jóvenes fueron directamente a sus taquillas allí estaba Robert esperándolos, al ver a Nick el sonrió y le dio un abrazo:

    -Por fin tío, te veo entero, lo mas seguro que echaras de menos tener rabo.

    Nick miro avergonzado al suelo y sintió un pequeño codazo de Helen, él supo rápidamente lo que quería decir. Miro a Robert a los ojos:

    -Ven conmigo a los servicios quiero enseñarte algo.

    Al entrar en los servicios, Nick miro a su amigo fijamente a los ojos, se fue transformando lentamente mientras hablaba, su voz cambiaba de masculina a femenina mientras el cambiaba físicamente:

    -Descubrí que puedo transformarme en chica a mi antojo, creo que este es mi poder Robert.

    Al volver a ser un hombre Robert lanzo una fuerte carcajada:

    -Sabes Nick ese poder es una chorrada, el poder tener súper fuerza o poder volar eso si que es un poder, quien se transforma en mujer.

    Nick se llevo la mano a la cara, pensando el porque se lo había enseñado. Al salir del servicio Helen cogió fuertemente de la mano a Nick y se lo llevo al servicio de chicas:

    -A hora toca que aparezca Érica no queremos que se pierda su primer día…….corre.

    Érica cerro los ojos mientras Helen la maquillaba lentamente, le repasaba los labios con el pintalabios y los ojos con colorete:

    -Helen tú jamás te pones maquillaje, porque me pones a mí.

    Helen le dio un pequeño retoque a su amiga:

    -Sabes porque tu personaje Érica le queda muy bien , eres una chica bien guapa.

    Érica abrió los ojos y se miro al espejo:

    -Solo espero que Jessica se fije en mí.

    Helen sonrió mirando a su amiga.

    -Solo espero que no te salgan muchos pretendientes masculinos cariño.

    Érica miro a Helen y se llevo las manos a la cara:

    -Por dios no.

    Sonó el timbre y todos los estudiantes entraron en sus clases, Helen se sentó en su mesa Robert se acercó a ella y le susurro al oído:

    -Nick……….digo Érica donde esta.

    Helen señalo la entrada de la clase donde estaba la profesora con una nueva estudiante llamada Érica y era australiana:

    -Buenas os presento a una nueva estudiante que viene de Australia se llama Érica Summer-Dijo la profesora-Érica háblanos un poco de ti.

    El bruto de Walter le agobiaba estar en clase, un espécimen como el prefería estar jugando a baloncesto. Prefería el baloncesto antes que ponerse a estudiar y usar el cerebro. De casi dos metros de altura y un rostro impenetrable era una bestia en los deportes de hay sacaría la beca para la universidad. Walter levanto su mirada al escuchar una dulce voz, vio allí a una chica nueva en clase y embobado se quedo, su corazón latía con fuerza y sentía como se iba enamorando. Dio un codazo a su amigo Jimmy un chico bajito de pocos musculos y gran inteligencia. Con un atractivo un poco confuso difícil de ver, conseguia escapar delos matones siendo el su cerebro. Este se quedo mirando a Érica sabiendo por la mirada de su amigo Walter que se había quedado prendado por esa preciosidad rubia. Érica volvía a tomar saliva había explicado lo que sabia de Australia a la clase y eso que de geografía andaba un poco corta, por dentro pensaba que seria mas feliz diciendo que era de Boston. Érica se adentro de la clase y se sentó junto a Helen.

    Nick estaba junto a su taquilla había vuelto a ser un chico, pero lo que se había encontrado era mas extraño para el. Una carta de amor. La olio lentamente sentia el olor de un delicado perfumen en ella, Robert llego junto a el con Helen:

    -Nick tendría que a ver estado en clase hoy, una pedazo rubia llego nueva al instituto. Creo que tendré fantasías con ella wooow-Rio Robert.

    -Solo que tengas fantasías conmigo ya me fastidia el día sabes Robert-Dijo Nick.

    Helen miro lo que tenia su amigo entre las manos, esos corazoncitos dibujados en la carta le intrigaban mucho. Se la quito de las manos:

    -Pero Nick que es esto una carta de amor, no es romántico.

    Robert se la quito de las manos:

    -Y esto es una carta de amor?

    -Normal que no sepas que es una carta de amor tu eres tan insensible con el amor-Dijo Helen suspirando.

    Nick cogió el sobre de sus manos y les leyó lo que ponía:

    -Escuchar lo que pone “Querido Nick te veo por las mañanas y siento como el corazón me late con fuerzas creo que estoy enamorada de ti”

    Levanto su mirada y vio pasar a Lilith con sus amigas, esa chica de físico de gimnasta, de justa musculatura para ser atractiva, pelo corto y rubio se quedo mirándole por unos segundos. Le sonrió tiernamente. El instante que duro su paso por el pasillo Lilith brindo a Nick de una mirada de amor.

    -Seguro que si te pilla esa Nick te parte en dos-Dijo Robert.
     
    #6

Comparte esta página