Sin Amor, no hay salud mental.

¿ Por qué la reina de Inglaterra
enloqueció ?
¿ Por qué no está en sus cabales ?
Y tiene el decodificador mental


o cerebro, averiado...


Será porque la mucha Felicidad,
provoca traumas. O bien,
debido a que su Majestad,
no quiso tener amigos


entre yeguas y caballos.


Plebeyos y artesanos,
burgueses e infanzones,
aristócratas y mercaderes,
modistas y amas de casa.


Cocineros y barrenderos.


Músicos y enfermeras, médicos
y dermatólogos.
¡ Cualquier oficio es digno !
A tenor de que la dignidad


es no dejar que otro te haga,


lo que tú no le harías a él.
Y tampoco dejarías abandonado,
a su suerte, a un cliente,
o a un paciente; o al vecino.


Al aldeano, al compatriota,


al ciudadano.
Tanto aislamiento, en ese castillo.
¡ Tan fría es la soledad, en Palacio !
Las buenas maneras, los planes


de conquista; Ajedrez que no cesa,


con estrategia y tácticas.
En lugar de eso, ¡ Comparta
sus muchas riquezas ! El arte,
por no helarte. Generosamente.


Devota, como Lady Diana Spencer.


Devoción e idealismo, su Alteza.
Baje de ese altar en el que anhela,
más que súbditos, tener colegas
de profesión. Colegas ingenieros


de caminos, canales y puertos.


Colegas profesores universitarios.
Colegas catedráticos de Derecho,
o de Filosofía. Colegas farmacéuticas,
y mancebas. Gente, en suma,


que desprenda destellos de Amor,


a través de su mirada.
La llama Violeta, que procede
del interior del bulbo central
galáctico: Devoción e idealismo.


Redención cristiana: Oro-rubí.


Por ello, la orino-terapia.
Aunque parezca vulgar,
pero Madonna, la cantante,
tomó buena nota y se apunta


aceptándose a sí misma.