Sin eso

Ahora de nuevo, te tengo en la cabeza; vos armado, idealizado. Comienza siempre como un deseo, de cruzarte por la calle, por ejemplo; de decirte "¿cómo la flasheamos el año pasado no?".

Sigue como peli, dónde me respondes, " si? era flasheo nomas?" y me invitas a tomar un café para charlar.

Nos sentamos en esa confitería, diciéndonos que nos gustamos, pero que no se puede nada, que tenemos que seguir como amigos, o conocidos, no sé. Después de eso me duele todo, pero por un minuto nomás porque ahí nomás me relajo y te digo (ya como amiga) "estoy saliendo con alguien que te conoce", vos me decís "ya sé, con tal", entonces te pido referencias de él, entre risas, contándote que solo lo vi tres veces y hace semanas que no se nada de él, que hay desinterés, lo cual es válido, digo.

Te quedás pensando y me mirás, me mirás más y me das un beso, para luego irnos. Cada uno por su lado, a seguir sin eso.

 

Me gusta este estilo tan personal en donde se percibe el relajo al escribir. Una locación común, unca conversación tansversal, el último sorbo y chau. De veras. Me gusta la autenticidad y el dejarse volar entre la rutina y la risa de amigos. Saludos. Ha sido un gusto, Cielo.

 

Muchas gracias Elisalle, valoro tu devolución, sólo me sale escribir desde el cotidiano y a veces siento que es una falla. Gracias ❤️

 

Es tu estilo y es valioso. Pocos veo escribir así, tan verdad, tan auténticos No sé, te seguiré leyendo para comocer más de tu palabra.
Son las cosas que llegan por que son cercanas, parecidas. Ya