Sin juzgar el alma (Poesía al dolor propio)

Qué difíciles tiempos, qué imposible se ve todo a través de este cristal.
Y el corazón se estremece y los músculos se contraen.
Pesa el cuerpo, cada centímetro de piel.
¿Cuál es la sentencia? Una eterna prisión llena de miedos y sueños sin cumplir.
¡¡¡Los sueños no!!! No, por favor. No hay nada peor que un sueño sin cumplirse, aquí en vida o allá dónde quiera que vaya… dónde quiera que este el final de mi camino.
Quiero llorar.

Pero las lágrimas no salen, duele el alma, no la piel.
Lloró por dentro y nadie lo sabe, por eso nadie puede verme, por eso nadie me entiende.
Sé… ya lo sé que es imposible y sin embargo aun así, te quiero a ti.
Sólo a ti.

Y cuando despierte y el sueño termine, sólo te querré a ti.
Y tú estarás muy lejos de mi, más que ayer, más que nunca antes.
Tú ya no estarás para protegerme.
Te habrás ido para siempre.
Por eso hoy sólo te quiero a ti.
Sólo a ti.

 

conmovedor poema, muy efusivo, muestra el grito del alma que no escatima letras, saludos!

 

Una eterna prision"

de un extremo al otro, del sueño al miedo...
y es el mismo lugar.

gusto leerte.
saludos.