Sinfonía antes del amanecer

"La felicidad no existe,
¡sólo existen momentos felices!"

Cuando yo le canto a tu cuerpo
mi alma es un mar de regocijo.
Migran mis penas a lejanos confines,
migra el dolor de ver llorar a mi gente.
Lloro entonces,
no por gusto, sí por sentimiento,
cuando yo le canto a tu cuerpo.

Cuando yo le canto a tu cuerpo
canta tu piel
cuando con mi piel se encanta.
Cantan a dúo,
¡estridente es la armonía!,
altisonantes las notas,
¡casi forzado el compás!

Cuando yo le canto a tu cuerpo,
orquestamos de nosotros lo mejor,
y aun, con la soga al cuello,
a pocas horas del cotidiano despertar;
aun, con todos los problemas a cuestas,
somos felices, ¡amor!

 

BELLISIMO, pleno de amor, saludos y estrellitas.