Sión.

SIÓN.

y creíste fulano tonto que ese oasis era el mar,
y sus dátiles invierno el maná divino,
que por no menos de cuarenta años
reencarnaría en pan.

y probaste el cuerpo sin levadura
el vino ocre sin medida
caminaste a fe ciega
a espanto sepultura.

Sin embargo
cuando los labios callaron
y se hizo agua la roca
con sutil congoja
te prohibieron el encanto

nacer en tierra nueva,
en suspiros mesiánicos,
vivir a cuentagotas
sin un animo desairo.

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a ella,

 

enormes letras, un abrazo, letras sentidas,,,

 

:::gafas1:::

 

Me ha gustado mucho pasar por tus versos, Nael. Saludos.