Siria

El miedo entre las ondas de arena en Siria avanza,
la crueldad de la guerra siega miles de vidas,
el odio escupe hiel de horror y de venganza
y abre en los corazones lacerantes heridas.

El terror ha inundado la paz de las moradas,
el amor, la alegría, la razón, la inocencia;
la barbarie edifica ciudades arrasadas
y ahoga la esperanza en un mar de violencia.

Ha girado sus ojos a otra parte Occidente
mientras esta nación en el caos se hunde,
mientras el crimen ronda sus calles libremente,
mientras entre sus pueblos la muerte se difunde.

¡Oh, Estados de Occidente, de almas altaneras,
mirad este país que muere entre batallas!
¡Olvidad el Olimpo, soltad vuestras banderas,
que más vale una vida que todas las medallas!

 

Olvida Occidente el dinero que es lo único que te mueve.
Tú, raposa, olvida los intereses económicos que te han convertido
en un criminal. Gran poeta, un abrazo y saludos para ti mi estimado
y amigo poeta David.
Te dejo reputación por este poema que es como un grito.

 

Muchas gracias, Dulcinista. Y es verdad, hay que gritar.
Otro abrazo.