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Sociedad Canibal. Capítulo 23.

Tema en 'Relatos extensos (novelas...)' comenzado por Kwisatz, 27 de Marzo de 2022. Respuestas: 0 | Visitas: 291

  1. Kwisatz

    Kwisatz Poeta recién llegado

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    CAPÍTULO 23​


    Cada día al atardecer y tomando como referencia la puesta de sol, Luke y Jane prosiguieron su huida hacia el oeste buscando la granja que Mike les había indicado.
    Caminaban al abrigo de la oscuridad en completo silencio durante la noche, mientras que de día intentaban dormir al refugio de alguno de los muchos promontorios rocosos dispersos en la llanura desértica.
    Ed seguía tras ellos. De vez en cuando podían oír en la lejanía el ruido de motores y voces amortiguadas por la distancia.
    Desde aquel día en que Jane había hablado de su pasado apenas habían vuelto a cruzar palabra.
    De todas formas no hacía falta, la tensión era palpable y el miedo a ser descubiertos estaba presente en cada momento.
    Por si no fuera suficiente, tras diez días de viaje, las escasas provisiones se estaban agotando pese al estricto racionamiento.
    Tanto Luke como Jane sabían lo que era pasar privaciones, pero si esa situación se prolongaba más días probablemente no podrían continuar. Ambos lucían un aspecto demacrado y famélico.
    Aún así no tenían más remedio que seguir teniendo fe en que avanzaban en la dirección correcta. Considerar otra opción era resignarse a la muerte.
    En la undécima noche de marcha, a la llegada del alba, primero Jane y después Luke creyeron divisar en la lejanía las aspas de un molino de viento y las formas de una alambrada.
    Quizá se tratase de la granja de Mike. Con un poco de suerte llegarían allí la próxima noche y podrían comprobarlo.
    Más vale que fuera así porque acababan de agotar su última ración de insectos y el último sorbo de agua que les quedaba.
    La mañana llegó y cómo ya era costumbre buscaron cobijo en uno de los huecos que proporcionaban las formaciones rocosas que los rodeaban.
    Ninguno de los dos tenía suficientes energías para mantenerse despierto para hacer guardia. Cayeron a plomo en el suelo, y pese a ser conscientes del peligro que corrían si ninguno de los dos vigilaba, el sueño pronto los venció.
    Primero Luke y después Jane se despertaron sobresaltados por el ruido cercano de pisadas.
    Todo estaba oscuro. Debido al agotamiento probablemente llevaban muchas horas durmiendo y la noche había caído sin ellos advertirlo.
    Los pasos se acercaban al compás de una voz refunfuñando algo entre dientes.
    El nerviosismo se apoderó de ambos. ¿Habían descubierto finalmente su posición y ahora estaban tendiéndoles una emboscada?
    Fuera quien fuese se estaba aproximando peligrosamente a su escondite. Ya estaba prácticamente sobre ellos cuando de pronto detuvo su avance. A continuación se produjo un silencio que pronto fue interrumpido por el sonido amortiguado de un líquido derramándose sobre el suelo arenoso. Era alguien orinando.
    Si permanecían en completo silencio probablemente no notaría su presencia. Ya prácticamente había acabado sus necesidades cuando se produjo un pequeño desprendimiento en la oquedad en la que él y Jane estaban ocultos.
    No fue muy aparatosa, pero sí lo suficiente significativa para llamar la atención de aquel individuo, que ahora se acercaba peligrosamente cerca a inspeccionar.
    Luke dirigió una mirada rápida y alarmada a Jane, la cual estaba con los completamente abiertos y respirando entrecortadamente por el pánico.
    No fue necesario cruzar palabra, Luke se incorporó y embistió contra las piernas del extraño que cayó sorprendido al suelo.
    Casi al mismo tiempo y antes de que el objetivo pudiera articular sonido alguno, Jane se lanzó sobre él sosteniendo la piedra más grande que había encontrado, y comenzó a golpear con furia el cráneo del intruso hasta que un ruido seco confirmó la fractura.
    Jane jadeaba por el esfuerzo y la tensión del momento. Cuando ambos recuperaron el aliento permanecieron en silencio escuchando con atención. No muy lejos de allí Ed y sus hombres estaban acampados.

    - Tenemos que huir de aquí inmediatamente- apremió Luke en voz baja.
    - Cierto. Pero antes tenemos que ocultar el cadáver. –Apuntó Jane.
    - Dejémoslo donde está. Tarde o temprano se darán cuenta de su ausencia y cuando lo encuentren sabrán que hemos sido nosotros y que estamos cerca.
    - Por eso mismo, cuanto más tarden en encontrarlo más ventaja podremos sacarles.

    Luke asintió y entre ambos lo arrastraron hacia su antiguo escondite y emprendieron la fuga.
    No había tiempo para buscar las escobillas de esparto, así que dejarían un rastro nítido fácilmente rastreable.
    Su única esperanza era llegar a la granja que divisaron el día anterior en la lejanía antes de la llegada del día.

    - ¿Alguien ha visto al inútil de Ted? El cabrón ha desaparecido hace más de una hora diciendo que iba a mear.
    - ¿Echas en falta a tu amorcito? – Bromeó uno de los mercenarios haciendo morritos.
    - Puto gilipollas, solo quiero cobrarme lo que es mío. Esta noche le he ganado media ración a los dados.
    - Lo mismo un escorpión le ha picado en la polla y se ha desmayado de verla tan grande- dijo otro.

    Todo el campamento rompió a reír excepto Ed, que últimamente estaba de un humor de perros. Llevaban más de una semana persiguiendo a esa pareja pero todavía no habían encontrado indicio alguno de su paradero. Era frustrante y humillante.
    Las risas lo extrajeron de su estado taciturno

    - ¿Qué es tan gracioso? – Preguntó malhumorado.

    Un breve silencio se instaló en seguida entre sus hombres.

    - Nada. Sólo que Billy dice que Ted hace más de una hora que salió a mear y aún no ha vuelto.

    Al oír esto a Ed prácticamente le dio un vuelco el corazón. Lleno de furia les gritó

    - ¡Malditos imbéciles! ¡Salid a buscarlo inmediatamente!

    Durante la siguiente hora se organizó una batida hasta que finalmente encontraron el cuerpo de Ted escondido en el hueco de unas rocas.

    - Han sido ellos, sin duda – Sentenció Ed.

    Registró las proximidades y encontró las huellas que esperaba encontrar. Todavía estaba demasiado oscuro para seguir el rastro pero en poco más de una hora amanecería.
    Mandó que pusieran a punto las motos y que le acercaran sus anteojos. Esta vez no se les escaparían.

    Mientras tanto Luke y Jane avanzaban todo lo rápido que podían en dirección a la supuesta granja.
    Aún estaba lejos y ambos ya advertían la llegada del amanecer. Quizá si estuvieran más descansados serían capaces de llegar antes de la salida del sol. Pero estaban al límite de sus fuerzas. Pese a la tensión y los nervios eran incapaces de aumentar la velocidad.
    El sol comenzó a salir a sus espaldas, y el mundo comenzó a iluminarse dejando a la vista un mar de sombras que fue cobrando una nitidez azulada conforme se alzaba el astro en el firmamento.
    Luke miró la silueta del molino de viento. No debía estar a más de medio kilómetro. Agarró fuerte de la mano a Jane y apretó el paso.
    En cuanto se hizo la luz Ed tomó sus anteojos e inspeccionó el horizonte. Al cabo de un par de minutos pudo ver la silueta de dos figuras avanzando lentamente hacia lo que parecía una granja.
    Inmediatamente envió a sus hombres en moto a que los apresaran.

    Un ominoso ruido de motores anunciaba la llegada de sus perseguidores. Lágrimas de desesperación y rabia asomaron en los rostros de Luke y Jane. A juzgar por el incremento del ruido pronto caerían sobre ellos. Tan cerca...

    Pero sus cuerpos no respondían. No podrían alcanzar la granja a tiempo. Aun así no cejaron en su empeño a pesar de saberlo inútil.
    Las motos ya casi los habían alcanzado. Luke estrechó con fuerza la mano de Jane y ésta le devolvió el apretón. Se miraron con los ojos empañados por las lágrimas sin decir nada y aguardaron su fatal destino.
    Uno de los motoristas ya estaba a menos de cincuenta metros de ellos cuando de pronto se escuchó el sonido de un disparo y cayó derribado.
    A continuación sonó un segundo y otro motorista que iba unos pocos metros por detrás fue abatido.
    El resto de motos al advertir lo sucedido se batieron en retirada.
     
    #1

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