Soledad

Mujer mas bella que tu… imposible;
ser que vela mis noches, imponente,
te escabulles bajo mis sabanas,
así de repente...

Eres intocable luna misteriosa,
parasitas esta mente, mi corazón
eres inmutable luz que oscureces mi razón;
eres mi castigo maldita silenciosa.

Pero… ¿Por que silencios ahora solo brindas,
a cambio de una, de mis mil caricias…?
ojala pudiera entender tus lamentos;
mujer imposible… Lo siento.

¡Soledad de mi alma!!!
¿Por que te fuiste, así súbitamente?
Ahora soy un desierto, infeliz y demenente.
¡Hoy , esta noche, quisiera tenerte!

Entonces, ¡Ay entonces¡, doncella mía;
ojala no descifres la amargura,
ni el saber de mi locura...
peor aun, las lagrimas del día a día
que aquejan el corazón de esta criatura,
no se vivir sin tu sombra, ¡Soledad mía!
Mujer, mi sino con tu nombre pusiste,
sino, Soledad, ¡bien triste!
Y tu corona nupcial, que ya en corona
de espinas convertiste,
mujer una vez mía,
mujer que huiste,
mujer arpía.
¡Ay Soledad! Me haces muy triste…

 

La poesía es comunicación. Tomándolo por ese lado creo que tu obra cumple con la primera condición. La presentas absolutamente limpia de faltas de ortografía, lo cual causa muy buena impresión al lector. Ten en cuenta que los que leemos no sabemos nada de tu vida. Vivimos de lo que nos cuentas. Te animo a que lo sigas haciendo con el mismo interés y sin desanimarte. Ten en cuenta que la opción de la poesía clásica requiere, como en todos los oficios, de conocimientos que no son visibles para el lector si no lo ha estudiado. Sigue adelante que vas muy bien.