Solo es otro día

Solo es un día más, una cruz sobre un número en el calendario
Y realmente es así, como la vida, una cosa más una alegría más, una tristeza más
Pero en el fondo, tras de sí, se esconden los pequeños matices, tan pequeños que se escapan a simple vista, esa vista tan acostumbrada a ver lo que los demás quieren que veamos.
Tan solo bastan unos segundos, tan solo hay que frenar en seco, dejar de correr para sobrevivir y pararte tan solo un momento en observar esas pequeñas cosas que te ayudaran a vivir.
Si consigues detener el tiempo veras que hay personas que sin hablar te demuestran que te quieren, que hay personas invisibles que siempre están ahí, en la sombra, sin hacer ruido pero que nunca dejaran que llegues a tocar el suelo.
Si consigues apartar las cosas, los números, el metal, ese vil metal, veras que se necesita muy poco para ser feliz, descubrirás que tan solo un abrazo o una sonrisa consiguen llenar tu alma aunque tus bolsillos estén vacios.
Al final del día, tras la lucha, el barro y la mente nublada descubrirás que nunca es tarde para volver, nunca es tarde para ser feliz, nunca es tarde para volver a sentir.
Al final, tan solo al final cuando apenas puedas abrir los ojos y el cansancio acabe con el aliento de tus esperanzas, solo en ese momento podrás observar que la vida se compone de pequeños matices, en nuestra mano esta hacerlos grandes y disfrutar de ellos todos los días del año.

 

Has hecho de un día común uno de singular esperanza, ha sido grato y muy grato leerte, un abrazo!