Sombras del Pasado.

"Sombras del Pasado."


Bajo el haz de luz truncada por las columnas del dolor,
Entre pesadas piedras y escombros del presente,
Viajando sin equipaje, llorando sin tristeza,
Vagando sin recuerdos, pensando sin consecuencias,
Heme aquí fijada en las fauces del abismo,
Atada al resplandeciente y delicioso hálito de la muerte,
Sin profesar amor al eterno amante,
Sin añadir más tragedias al guión de la partida,
Sin coleccionar más esculturas en mis andares infinitos,
Ni aquí, ni allá, ni en la honda eternidad,
Ni en la inmensa infinidad de este ardor interminable,
Ni en la melancolía infructuosa,
Ni en los hechos fortuitos que trajeron emociones amadas,
Ni en los hechos planeados que trajeron conmociones odiadas,
En el panteón de mis angustias, el féretro de mis suspiros,
En el breve instante de amar, si, amar, amar hasta hoy,
O quizás mañana sea para mí lo que fue para ti el sepulcro del pasado,
El viento muerde mis anhelos y esperanzas,
La melodía desesperada del último segundo resuena en mis memorias,
La dulce lira que tocaba las alegres notas del porvenir, hoy, desentona en mi sinfonía
En el letargo aún puedo creer que todo fue dulce y benévolo,
Que la muerte será sólo un breve sueño,
Que pronto despertaré y todo será copiosamente maravilloso,
Que mi lecho estará forjado en oro puro,
Que mis paredes estarán esculpidas con magníficas figuras en mi adoración,
Que el mundo gira entorno a mí, entorno a mis intereses y pasiones,
Que tú serás mí consorte hasta la eternidad y heredero al trono,
Que me desposarás y que todo será de ensueño,
¡Qué satírica falacia!, pero ¿Acaso no es de mentira que se construyen los sueños?
Pues los sueños, sueños son, porque no son realidad,
Pensamientos, mártires de la mente, truhanes con sueños,
Amor, ente ruin que causa todas las patologías posibles,
Pero, nada cambiará, el tiempo no se detendrá ni escuchará mi lamento,
El pasado se reirá como verdugo que es,
El presente querrá estar de testigo en la inquisición de los minutos,
Y tal vez hoy lo haga por primera vez,
Cuando en el cierre infinito de párpados, se disuelva el futuro,
Y el pasado y el presente se fundan en ese espacio-tiempo en reposo,
Dónde no hay expectativas, pero quién estará para contarlo,
Sólo el tiempo, pues únicamente el relatará las desdichas de una desconocida,
Las desgracias de un ser que se consumió en la llama ardiente,
Y, sus cenizas son la tinta con la que se escribe este eterno lamento...

¡Qué extraños caminos los que me han traído hasta aquí! ¡Maldita Ironía siempre presente!

 

Mucha fuerza en este poema, mis estrellas y aplausos.

 

Wow...yo..me quedé absorta, por un instante, en la infinidad de imágenes quelogré rememorar a traves de lo que tus letras ilustran.
Fácil se torna, identificarse con ud...maravillarse también.
Me quedo sin palabras ante tanta aridez...
Decir que me ha parecido excelente, estaría de ás, no?
.:Tati:.