Son tus labios

Rojos, destellantes, circulantes
como sangre
sangra la pasión, se humedece mi vos
me ahogo en palabras, en susurros
que escucho como el viento.
-Quiza el viento tiene vos propia-

Son tus labios el traductor
de aquella brisa mensajera
ardientes, mínimos
llenos de grandeza
de dulzura y fervor.

Es tu boca un templo sin dios
Un palacio de lujuria
Brillante como el oro sol
Que irradia temor y locura
Temor que me vuelve adicto
Locura que me lanza al fuego
Al rojo de tus labios
que incineran mi alma
que carbonizan mi ser.

Tus besos…
Erupciones de gozo y de placer.​