Soneto con dolor

Tengo un soneto triste en la garganta,
que no puedo cantar, pero yo sigo,
más temprano que tarde te lo digo,
No importa que me duela, si se canta.

No dormiré feliz como una planta
cuando un verso se pase al enemigo
Prefiero compartir con el amigo
el soneto que me dicta una santa.

Nunca faltará inspiración divina
y la métrica perdonará un "ones"
Hoy llora, escondida en la cocina.

Más habrá siempre amigos de la rima
que buscarán en todos los rincones.
Y un soneto tendremos en la cima...

Frank Calle (8/ nov/ 2022)

 

Nunca falten los amigos de la rima, querido Frank. Un gran abrazo.

 

Bueno, en un sentido figurado, esos amigos son las musas y lo espíritus amantes de la poesía. Esta vez me puse un camino dífícil, para tratar de salirme de las rimas típicas, y obligarme más, sin saber bien a donde conducía ese camino, y ese fue el resultado.

Un abrazo,

Frank
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Más sonetos. Eres de palabra. Un abrazo, Frank.

El octavo verso va acentuado en séptima; el noveno en quinta y el undécimo es decasílabo.

 

Bueno, es ta vez fue un ejercicio de academia. Me puse un tema complicado, sin saber hacia dónde me llevaba, con la idea de evitar las rimas forzadas o más simples, y ese poema fue el resultado.
Pero realmente me motivaron y no está mal la idea de trabajar el soneto. De hecho tengo hasta ahora, en este portal, más de 700 poemas , contando desde el 2018, y por lo menos la mitad de ellos tienen temas que pudieran dar o ser motivo de sonetos. Incluso, sin mirar entre ellos, anoche dejé en punta (en primera estrofa) 3 sonetos preelaborados, uno de ellos que parte de Romeo y Julieta, como trasfondo, pero todavía no sé a dónde conduce.

Muchas gracias por el "empujón". Lo único que ahora me frena, es que tengo mucho trabajo en la universidad, demasiado para mi edad. Pero al mismo tiempo, esa presencia de no poder terminar es la espada que cuelga sobre mi cabeza, y me genera fuerzas para continuar. He retomado incluso el ritmo que tuve por muchos años, de no dormir más de 2 o 3 horas por día. Entonces me siento excelente, como auto que puede comer kilómetros a 80 millas, en una carretera casi desierta, que es la madrugada...

Un abrazo,

Frank