Soneto Quinto:

Helena, nombre de antorcha, esencial natural,

Nombre de aquello que nace en la tierra y perdura,

Fragante atlas y ardiente hoguera, estupor de luna,

Brizna húmeda que erradica lo áspero y erial.



Tu nombre alberga el candor de lo primaveral,

Otoño inmensamente esclarecedor que arrulla

Al verbo herido de inviernos, cuya alma desnuda

Quiebra el fulgor que el verano esculpe artesanal.



Ah, nombre hilado en la avidez de una enredadera,

Cuya brizna elemental fue de agua y tierra y viento,

Aunando en mera palabra a la naturaleza.



Sumérgeme en tus ojos infinitos de ausencia,

Hazme esclavo en tu navío de amor lisonjero,

Pero déjame navegar en tu nombre, Helena.​

​

 

profundo y enamorado poema, grato leerle

 

Bello y sentido poema nos dejas.
Un gusto leerte. Saludos.