Soneto XVIII

XVIII​

A LA “PEQUEÑA SEÑORITA ZORRA”

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“Apaga, si quieres, tu lámpara; yo ​

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conoceré tu oscuridad y la amaré.”
Rabindranaz Tagore


Me agobia de tu fortuna el sendero,

puella inocuade cobriza melena,​

pues una ávida duda aún cercena

mi corazón con un dolor artero.​

Decime, oh Nereida de amor austero;

¿ese impío licor tu ardor serena​

y el banal hachís tu suplicio ordena?

respondé pues, que comprenderlo espero.​

Sé que irónico resulta increpar,

pues mis propios precedentes son liosos;​

pero, si el Tedio alcanzara a viciar

[SIZE=3]tu pulcritud con sus juegos astrosos,[/SIZE]​

[SIZE=3]decime, ¿a quién habría de nombrar[/SIZE]
[CENTER][FONT=Times New Roman][SIZE=3]Deidad de mis rituales amorosos?[/SIZE][/FONT][/CENTER][FONT=Times New Roman]
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muy bien poeta, que bueno que se escriben todavía sonetos. mis saludos