Soneto XXIV

XXIV

EL SEXO CON AMOR, NO ES UN MANDATO


Es claro; tu razón sobrestimé,
pues creí: tan ingenua no ha de ser;
pero, al ver que tu “Amor” querés vender
con cursis idioteces sin porqué

ruego al sabio Lucero que te dé
esa sagacidad para entender,
que no es obligación de la mujer
donar a cada amante su querer.

No aspiro a ser de Asmodeo el vocero
pregonando su elocuente alegato
(aunque repudio el compromiso austero

y no busco la “virtud” ni el “recato”),
sólo afirmo, no en tono de mocero,
el sexo con amor, no es un mandato. ​

 

Interesante soneto, con versos muy escogidos, bien planteados, por supuesto con sabrosa rima, de un enamorado convencido de sugerir sabios consejos, a su amada, en un poema muy bien definido en su convencida expreción hacia su dama preferida. Felicidades y adelante, que entre más sonetos mejores versos. Atento saludo, Crimolem.