Sublima.

Los atardeceres desde los árboles,
tiernos soles bajando a un mar violento,
dulces versos volviendo sombras los sueños
cascadas hirientes como pequeñas piezas de espejo
mis ayeres...
mis ahoras…
medias horas…
soledad,

la estética…la belleza de tus claras pupilas…
cerrar tus ojos que caso tendría?
se llenan de desdichas éstas frías madrugadas
trascienden, no acaban
las lagrimas que deja caer al suelo tu angustiada alma
de tristeza nos empalma,
de deseos que no tienen ni una poca de esperanza,
sumergen en el lago tu expresiva cara..
y nos preguntamos ambas…
que nos queda de este día…?

las palabras con las que vamos a iniciar
si yo me quedo, tu te vas…
soñando lo que no debemos soñar,
atrapando lo que no debemos atrapar
despertando a quien no debemos despertar…
brindemos ésta noche
por los monstruos en los que nos hemos convertido,
y descansemos una vez mas,
donde descansar antes estaba prohibido.