Te ves en el espejo y pues, ya no eres.

¿Habrás amado tú oportunamente?
¿Amarás todavía a la primera
o tal vez la segunda o la tercera?
¿Has sido tú tenaz y permanente?

Es fácil exigirle a la otra gente
lo que no hemos de dar porque nos quiera,
y luego nos volvemos una fiera
si nos cubre de olvido indiferente.

El amor es de dos, de tres o varios,
es una interacción, correspondencia,
se alimenta con celo y con paciencia.

Mas se puede morir. Son sus sicarios,
los procesos de cambio de los seres.
Te ves en el espejo y pues, ya no eres.

Luciana Laura Rubio Vega​

 

Muchas gracias, Luis Rubio, por tu gentil y generoso comentario. Un saludo.

 

Reflexivo y de buen ritmo. Y cargado de verdades.

Un gusto de lectura ha sido, Lucuana.

Abrazos

Gus

 

Muchas gracias por leer y comentar. Un abrazo.