Te ví

Y tome mi diário y escribi lo de aquel día...
Te vi caminando frente al parque
y te segui con los ojos sin parpadear
para no perderme un solo detalle
de tu imagen celestial

Pasaste sin mirarme y
espero cada día frente a aquel parque
y te veo pasar como cada tarde,
con esos ojos brillantes y mi corazon palpitante

Y es que no me atrevo a saludarte,
me aterro aunque lo deseo a cada instante,
por eso escondido tras este arbol prefiero solo observarte
​

 

La sombra de la timidez o indecisión arropando a un gran amor. Un placer dejar mis saludos.

 

Hay temores que apresan la felicidad, así como sueltas los versos, déjate llevar, un gusto disfrutar de tu poema, saludos cordiales.

 

La calidad soberbia de la obra sobresaliente.