Tempestad del adiós.

Restos de nubes vuelan

las gélidas gotas cortan el aire

bajo la tempestad no se libra nadie

si los cristales derretidos por la noche acechan.



Así el tiempo se detiene

en un pequeño cuento se entretiene;

jugar a los dados con el reloj es un suicidio

que lo acepte y apueste entre risas, homicidio…

hazaña destinada a psicópatas y dioses

se niega y martiriza a los habitantes de los soles.



Las polillas endemoniadas corren hacia la luz

para ser destrozadas por las balas

aquí bajo tu almohada no existe luz



pues en el lado oscuro de la luna no hacen falta alas.



Restos de nubes vuelan

Las gélidas gotas cortan el aire…



El último suspiro toca el papel y lo desintegra

bajo el cielo en destrucción no se libra nadie.

 

Yo sí me he librado.
¿ Cómo ?
Sorteando obstáculos y vida canalla.
Como en Kill Bill II, os mantengo a raya.


Inundo la ciudad, con sonido y palabras.
Observo desde arriba, sin vértigo ni nada.
Mi mirada láser abrasa tu cara.
Mi noción del juego es nueva en la galaxia.





Necesito adeptos para un nuevo invento: El requisito es sólo prestarme tu cerebro.


Bueno...
Así suena una canción de Sara da Pin Up.


Soy el tipo de chica que siempre es bienvenida.
Soy el tipo de chica que quieres en tu vida.

 

Gracias por tu comentario Nommo, saludos.